_
_
_
_
_

El plan Barre no resuelve nada a corto plazo

A pesar de las críticas y manifestaciones en contra que ha recibido el Plan Barre por parte de sectores diversos, para Pierre de Calan, ex vicepresidente de la Confederación Nacional de Patronos Franceses, sería incluso necesario la elaboración de un segundo plan Barre para que sus efectos, tanto a nivel del relanzamiento de la actividad industrial, como en el plano del control de la inflación, fueran apreciables.En cualquier caso, no hay que esperar grandes éxitos a corto plazo, por las incertidumbres que quedan todavía en el plano exterior y monetario y porque, en definitiva, el programa económico adoptado por el Gobierno Barre recientemente consiste en medidas coyunturales que no atacan los problemas de fondo. Esta tesis fue expuesta ayer por Pierre de Calan, como representante de los grandes empresarios franceses y compartida igualmente por el señor Poirsin, director de los servicios financieros de la Confederación General de la Pequeña y Mediana Empresa Francesa que desarrollaron el tema El plan Barre y la lucha contra la inflación ante empresarios, financieros y banqueros de la Asociación para el Progreso de la Dirección.

Después de una detallada exposición sobre los aspectos y objetivos fundamentales del plan Barre, Calan hizo una brillante defensa de la libertad empresarial, del no intervencionismo del Estado y de la potenciación de los sectores privados como medio para combatir la inflación. La prosperidad de las empresas en Estados Unidos y en la República Federal Alemana son prueba de ello -señaló-. Además, aquellos países donde el sector estatal juega un gran papel, como Inglaterra e Italia son los que poseen un elevado índice de inflación. Por el contrario, allí donde el sector del Estado es casi inexistente, el grado de inflación es menor.

Pero todavía apuntó el representante de la CNPF un dato más, si no para combatir la inflación, sí para comprenderla. La palabra inflacionalidad es algo así como la susceptibilidad o la facilidad de las economías occidentales europeas para atrapar la inflación. Ciertos economistas, incluso, hablan de que hay que acostumbrarse al fenómeno inflacionista.

La intervención de Poirsin fue una apasionada exposición de ataques al plan Barre y de lamentaciones por la situación de cenicienta en que quedan la pequeña y mediana empresa francesas, perjudicadas claramente por el bloqueo de los precios, las restricciones de los créditos, junto con el incremento de los tipos de interés y las exigencias fiscales que incurren muchas veces en la doble imposición.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_