“No hay escenario que ponga en duda los Juegos de Río 2016”

Recién nombrado ministro interino de Deportes, Ricardo Leyser (São Paulo, 45 años) tiene la misión de entregar los Juegos Olímpicos de Río 2016 en medio de una de las mayores crisis políticas de la historia de Brasil. Leyser ha seguido el proyecto de los Juegos desde su concepción y está mucho más vinculado a los deportes que su predecesor. Ahora, ante la posible destitución de la presidenta, Dilma Rouseff, necesita blindar la competición. Hasta la ceremonia de apertura, el 5 de agosto, tiene que resolver “miles de pequeños problemas”.

Pregunta. ¿Cómo es la relación de los órganos olímpicos con el Gobierno Rousseff? ¿Preocupa una posible destitución de la presidenta?

Respuesta. La relación es muy buena. La presidenta tiene relación con el presidente Thomas Bach [presidente del Comité Olímpico Internacional]. Lo recibió todas las veces que vino a Brasil. Él tiene libertad para exponer sus preocupaciones. En cuanto a esta cuestión del impeachment, no podemos hacer comentarios. No podemos trabajar con hipótesis, vamos a trabajar con la cuestión de la entrega de los Juegos. Fue una solicitud de la presidenta que se montase un ministerio 100% técnico.

P. ¿La salida de Rousseff implicaría algún problema para la celebración de los Juegos?

R. Los Juegos están casi listos y no son una tarea solo del Gobierno Federal. Son una tarea del Comité Organizador Río 2016, del Ayuntamiento, del Gobierno del Estado y de la Unión. No hay ningún escenario que amenace a los Juegos, que los impida.

“Ninguna obra está fuera del cronograma ni necesita una atención especial”

P. ¿Ni el impeachment?

R. No hay un escenario que pueda poner en duda la realización de los Juegos en Brasil.

P. ¿La crisis política no perjudicará a los Juegos?

R. No. El primer factor es que los Juegos están casi listos. Así que no hay presión sobre la preparación. No hay ninguna obra que esté fuera del cronograma y que necesite una atención especial. El segundo factor es que los Juegos son suprapartidistas. Varios Gobiernos han tratado de conquistar ese derecho para Brasil, así que Brasil está muy orgulloso de ser la sede. Varios políticos en el poder o en la oposición abrazaron este proyecto, lideraron candidaturas de Brasil en diversos momentos. Vemos cierta unión en torno a este tema.

P. Brasil perdió en diciembre el primer plazo del acuerdo de suministro de energía eléctrica para los Juegos y el COI se quejó. ¿Esta cuestión está resuelta?

“La parte crítica de la operación está en los aeropuertos, las aduanas, la seguridad...”

R. La gran preocupación ya no existe. Ahora son varias pequeñas preocupaciones acerca de varios lugares de competición. Puede haber algún lugar que no esté resuelto al 100%. Pero esto no es algo cuya solución no esté sobre la mesa, es más una cuestión técnica y operativa que de financiación.

P. ¿Ya se han comprado los generadores de energía para las sedes de las pruebas?

R. Está resuelto. Obviamente, proyecto por proyecto, lugar por lugar, existen decenas de pequeñas cuestiones y discusiones técnicas sobre qué hacer. [...]Pero cuando uno mira el conjunto, la situación está bien resuelta.

P. ¿En qué porcentaje?

R. Cuando hablamos de estructura, hablamos de un número que se va aproximando al 95% de media.

“La situación estará muy controlada, con un riesgo muy bajo de que haya problemas con el zika”

P. ¿Cuál es el punto crítico de los Juegos en estos momentos?

R. Los aeropuertos, las aduanas, la seguridad, todo eso entra en la parte crítica de la operación. Crítico, no en el sentido de que una obra esté retrasada, sino crítico porque ahora es el momento de que la operación corra correctamente.

P. ¿Cómo están manejando el tema de la seguridad y las amenazas de ataques terroristas?

R. Tenemos una buena experiencia, con los Panamericanos de 2007, los Juegos Militares de 2011, la Copa de las Confederaciones de 2013, la Copa del Mundo de 2014 y Río+20. Hemos tenido en los últimos años una serie de megaeventos en los que la seguridad ha sido probada y aprobada. A pesar de que Brasil no tiene un historial de ser blanco de atentados, estamos muy atentos a esa situación internacional y cooperamos con todos los organismos internacionales. Creo que Río es una de las ciudades más preparadas del mundo.

P. ¿Cómo está la cuestión del virus del zika?

R. Es una novedad. Brasil ha tratado directamente con la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ha reconocido los esfuerzos del país en este sentido. Así que se han tomado todas las medidas. Sabemos que es una época en la que la incidencia del mosquito cae drásticamente y hay toda una movilización tanto del Gobierno como de la sociedad para hacer frente a este problema. Creemos que vamos a estar con la situación muy controlada, con un riesgo muy bajo de que las personas tengan problema con el zika en los Juegos Olímpicos.