"Los deltas se están hundiendo"

Albert Kettner, holandés, de 39 años, es científico en el Instituto de Investigación Ártica y Alpina de la Universidad de Colorado (EE UU). Es uno de los coautores de un informe que muestra que la mayoría de los grandes deltas del mundo se están hundiendo.

Pregunta. ¿Cómo ve el problema del cambio climático y la subida del nivel del mar?

Respuesta. Los deltas son cada vez más vulnerables a las inundaciones, ya sea por los ríos que los alimentan o por tormentas oceánicas. Esto se debe no sólo a la subida del nivel del mar sino incluso más a factores humanos como la retención de sedimentos fluviales en las presas y embalses, la construcción de diques en los ríos, que empujan los sedimentos a aguas más profundas en lugar de alimentar las llanuras costeras, y la compactación del terreno para la extracción de gas y agua.

P. ¿Qué piensa de la cumbre de Copenhague?

R. Es una reunión de la máxima importancia, dado que el Protocolo de Kioto finaliza en 2012 y todavía no se han fijado objetivos mundiales, respaldados por los gobiernos. Los científicos suministramos estimaciones de lo que puede ocurrir en el futuro. Luego corresponde a quienes deciden crear las políticas necesarias. Cada individuo puede contribuir a combatir el problema, pero un acuerdo mundial sería fantástico.

P. ¿Cuál sería el resultado ideal de la cumbre?

R. Un protocolo del clima que sea reconocido por todos los Estados participantes -los ricos y los menos ricos-, que contenga un acuerdo completo de reducción de las emisiones de CO2 del 25% al 40% para 2020 respecto a los niveles de 1990, en el que los países más ricos ayuden a los otros, por ejemplo con financiación, para que accedan a tecnología de energía limpia de forma asequible.

P. ¿Con cuál resultado sería un fracaso?

R. Si las naciones ricas no extienden sus obligaciones del Protocolo de Kioto a partir de 2013.

P. Dice que cada individuo puede contribuir a la lucha contra el cambio climático, ¿de qué forma?

R. Por ejemplo, calentar la vivienda en invierno un grado menos de lo normal y a cambio vestir un jersey, utilizar la bicicleta o el transporte público para ir a trabajar una vez a la semana en lugar del coche, cambiar las bombillas por las de bajo consumo, aislar mejor la casa, comprar electrodomésticos de bajo consumo, instalar energía solar, ser más consciente de tu propio impacto y actuar en consecuencia. Muchas pequeñas contribuciones tendrán un gran efecto.