Segundo vuelo del minitransbordador secreto de EEUU
La Fuerza Aérea niega que el 'X-37B' sea un nuevo tipo de arma espacial
Si el primer vuelo experimental del X-37B, un pequeño transbordador espacial automático, suscitó rumores y sospechas dado el secretismo que rodea su desarrollo, el segundo lanzamiento, hace unos días, confirma la vitalidad de este programa militar estadounidense que sigue rodeado de misterio. El X-37-B fue lanzado el pasado viernes desde la base espacial de Florida con un cohete Atlas 5 y, según la poca información que han proporcionado los responsables de la Fuerza Aérea de EE UU, el objetivo de la misión es ensayar nuevas tecnologías relacionadas con vehículos espaciales. El lanzamiento se retrasó un día debido a problemas técnicos añadidos a las malas condiciones meteorológicas en Florida, según ha informado Space.com.
El primer X-37-B fue lanzado en abril del año pasado y estuvo en órbita 224 días, hasta su aterrizaje en diciembre. Es un avión espacial parecido a los transbordadores de la NASA, pero más moderno, completamente automático (no lleva astronautas) y mucho más pequeño. Mide nueve metros de longitud y 4,5 de envergadura, por lo que dos de ellos cabrían en la bodega de los conocidos Discovery o Endeavour. Otra característica diferencia a estas naves: el minitransbordador lleva paneles solares, lo que facilita su larga permanencia en el espacio, que puede ser de hasta nueve meses, mientras que los viejos transbordadores que la NASA está ya retirando están limitados a un par de semanas.
Durante el primer vuelo, el año pasado, los especialistas ensayaron sistemas de navegación, nuevos materiales y tecnologías espaciales avanzadas, según comunicó escuetamente la Fuerza Aérea. Sin embargo, su larga permanencia en órbita y el secreto que rodea todo su desarrollo levantó cierta preocupación en el entorno internacional, especialmente en Rusia y China, por si pudiera tratarse de algún tipo de arma espacial, señala space.com.
El X-37-B, construido por la empresa Boeing Phantom Works, nació como un proyecto de la NASA, pero fue cancelado en 2004 y lo asumió la agencia de investigación militar DARPA (Defence Advanced Research Projects Agency). El segundo vuelo, además de ensayos de nuevas tecnologías espaciales podría incluir también pruebas de procedimientos para la reutilización de la nave y su rápida preparación entre misión y misión.
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