Castilla-La Mancha prima al varón en las ayudas para cuidar hijos

Castilla-La Mancha da una vuelta de tuerca a la idea de discriminación positiva. Si una pareja decide acogerse a una reducción de jornada o una excedencia para dedicarse a cuidar a su hijo, recibirán una ayuda del Gobierno autonómico (de hasta 1.200 euros mensuales) si es el hombre el que lo hace. Las mujeres solo podrán acceder a este tipo de ayudas si son la cabeza de una familia monoparental, si son víctimas de violencia machista o si uno de los miembros de la pareja es discapacitado.

Así lo establece la convocatoria de ayudas para 2011 del plan de Conciliación de la Vida Laboral, Personal y Familiar de Castilla-La Mancha, aprobadas ayer. El Gobierno castellano-manchego intenta fomentar de manera más efectiva que los varones se corresponsabilicen del cuidado de los hijos, ya que solo el 2% de quienes piden esas ayudas son hombres.

Hasta ahora, otras iniciativas de discriminación positiva de este tipo no han funcionado. El Gobierno vasco decidió en 2002 que las ayudas por reducción de jornada o excedencia para cuidar a los hijos fueran más cuantiosas si la pedía un hombre. Pero el pasado verano decidió eliminar esa diferencia por sexo porque el porcentaje de varones que las solicitaban apenas había variado: pasó del 5,3% al 5,8%. Castilla-La Mancha también tenía establecido que los hombres cobraran ayudas más altas, pero, ante la poca incidencia de esta medida, han decidido ir un paso más allá. El año pasado 2.300 personas recibieron estas subvenciones.