Superman pierde la fuerza de la kryptonita
La batalla legal por los derechos del personaje amenaza con modificar la leyenda de los orígenes del superhéroe
¿Seguirá siendo Superman el último superviviente del planeta Krypton? La larga guerra legal por los derechos de Superman tiene nuevo episodio que puede afectar seriamente a la leyenda que envuelve al más famoso icono del cómic americano. Los herederos de Jerry Siegel -cocreador junto a Joe Shuster del personaje- se apuntan la victoria en una batalla que puede tener resultados poco agradables para el gigantesco conglomerado de Time Warner, propietaria de la DC, la editorial que publica el personaje desde 1938.
Según la última sentencia, el juez considera que los datos provistos por el especialista Denis Kitchen en un blog de la página web de noticias Newsarama son decisivos para demostrar que muchas de las ideas publicadas en algunos de los cómics del personaje habían sido diseñadas por el guionista mucho antes de que la editorial encargase a los jóvenes autores la creación del personaje. Según las leyes americanas de copyright, si la creación se ha realizado por encargo, legalmente los derechos pertenecen a la editorial, por lo que es necesario demostrar que existen evidencias de una creación anterior a la relación laboral.
Kitchen aportó pruebas encontradas por la familia Siegel de un antiguo proyecto del guionista con el dibujante Russell Keaton que no llegó a ver la luz en los periódicos. En él se presentaba la historia de un bebé de extraordinarios poderes que llegaba del futuro en una máquina del tiempo, enviado por el último hombre sobre la Tierra al año 1935 para ser descubierto por los Kent. La pareja lo adoptaría después con el nombre de Clark Kent.
Las coincidencias son evidentes y la decisión judicial es clara: los herederos de los Siegel deben recuperar los derechos de autor del cuarto número de la revista Action Comics, algunas páginas del primer número de la colección Superman y las dos primeras semanas de las tiras diarias que se publicaron en los periódicos estadounidenses. Precisamente aquellas pocas tiras diarias donde Siegel y Shuster desarrollaron el origen del Hombre de Acero, creando su origen en el planeta Krypton: ante la inminente destrucción del planeta, el científico Jor-El introduce a un recién nacido Kal-El en una nave espacial que le llevará a la Tierra y será encontrada por los Kent. Una historia que ya forma parte de la cultura popular y que ahora sólo podrá ser utilizada con el consentimiento de los herederos del autor. Ya sea en películas, series de televisión o, por supuesto, en cómics, las nuevas aventuras de Superman no podrán hacer referencias a sus orígenes kryptonianos sin acuerdo previo.
Un sorprendente nuevo capítulo en la larga guerra que se inició entre los autores y la editorial hace décadas, pero no inesperado: aunque el gigante emporio mediático de Time Warner lucha con uñas y dientes por los pingües beneficios que le proporciona Superman, poco a poco va perdiendo a su famoso personaje. Pese a que la muerte de Joe Shuster sin descendencia le proporcionara el 50% de los derechos del Hombre de Acero, las leyes americanas en derechos de autor fijan el año 2013 como límite para ese control. A partir de ese momento, el personaje revertirá totalmente a los herederos de sus creadores (en este caso, de Jerry Siegel) hasta el año 2033, en el que Superman pasará definitivamente al dominio público.
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