Una solución lógica
La parafernalia montada con la visita del Papa en un Estado aconfesional es ilógica, primero por la consabida y discutida financiación de la misma. Después, por la ocupación durante seis días del espacio público, corte de vías públicas, despliegue policial, despliegue de medios públicos y molestias a los ciudadanos, católicos o no. Mi pregunta es ¿por qué tiene que venir el Papa y desplazarse ciudadanos de todo el mundo a Madrid? ¿No sería más lógico y económico efectuar los encuentros de la juventud en la ciudad-país del Vaticano? El Papa no tendría que desplazarse con todo lo que conlleva, a la gran mayoría de peregrinos les daría lo mismo desplazarse a España que a Italia, el gasto de los españoles desplazándose a Italia compensaría el de los italianos desplazándose a España, los españoles nos evitaríamos gastos, molestias y enfrentamientos, los patrocinadores altruistas podrían donar el dinero a Somalia y Haití y todos contentos.
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