La velocidad de Wilko Johnson se une a la mesura de Bryan Adams

El guitarrista anfetamínico y desquiciado de los desaparecidos Dr. Felgood, Wilko Johnson, se antoja como una de las visitas más interesantes. Casi en sus antípodas, Bryan Adams compensa tanta energía con baladas y pop políticamente correcto. Burning reivindican su peso histórico en el pop-rock español y presentan en casa Altura, su último disco. Billy Corgan, tras dejar Smashing Pumpkins, enseña a Zwan, su nuevo grupo

- Visitantes ilustres. A finales de los setenta y comienzos de los ochenta, Dr. Felgood era una de las bandas más queridas en Madrid. Sus continúas visitas convirtieron a su guitarrista, Wilko Johnson, en uno de los ídolos que luego más influyeron en muchos grupos de la movida madrileña. Su peculiar manera de tocar la guitarra, esos largos riffs correteando por el escenario sin descanso, era todo un espectáculo. La banda cayó en desgracia cuando Wilko la abandonó, y la puntilla la puso la muerte de su cantante, justo un día antes que falleciera Kurt Cobain, de Nirvana. Pero Wilko Johnson no ha dejado de ser un intenso guitarrista en todos los proyectos que ha tenido desde entonces, y ahora, aunque sin el brillo de la fama de antes, sigue ofreciendo soberbios conciertos llenos de blues, rhythm and blues o boogie-rock. Será digno de ver cómo frenar tanta energía en un tan pequeño como el del Suristán, y a ras de público.

Es lo opuesto del canadiense Bryan Adams, con todo el boato de banda de rock y pop de sonido limpio y pulcro, y en formato agrandado. La Cubierta acoge sus cálidas baladas y sus canciones a medio tiempo, que siempre cuentan con el aliciente de estar correctamente ejecutadas y con cierto apasionamiento del artista. Pero las visitas internacionales en el apartado del rock no se completan sólo con estos dos artistas antagónicos. Hay heavy-metal renovado con Samael y Cathedral, buen pop-rock con los portugueses The Gift, fusión con Allsystemsgo! y su interesante disco Mon Chi Chi, y, sobre todo, renovación con Zwan.

Tras este nuevo proyecto, que presenta en la Riviera su ópera prima Many Star Of The Sea, se esconde Billy Corgan, el líder indiscutible de los desparecidos Smashing Pumpkins, acaso una de las bandas más influyentes de los noventa.

- Las damas primero. El gaditano Javier Ruibal vuelve a Madrid tras dos meses sin aparecer por el Galileo Galilei, donde no había mes que fallara. Sus espléndidos recitales, cruces de caminos entre la música popular andaluza, África, el jazz y el Caribe, siguen versando en torno a Las damas primero, su último disco, y sirve de simbólica acogida a la interesante programación femenina de la semana. Hoy mismo la levantina Inma Serrano expone toda su sensibilidad ante el selecto público de Libertad 8. También hoy, Marta Botia estrena Cumplir lo prometido, su primer disco en solitario tras abandonar el dúo Ella baila sola. La voz jazzera de Martha Patricia se pone al servicio de los saxos y flautas de Jorge Pardo, y Olvido Alaska, al frente de Fangoria, hace doblete en el programa Conciertos Únicos que se celebra en Galileo Galilei.

La cantante del grupo de música celta Capercaillie, Karen Matheson, se presenta en solitario en España con su disco Time to fall, donde sigue brillando su voz pura y cristalina. Y en Rivas, Niña Pastori hará valer su aportación última que ha hecho al flamenco dotándolo de modernidad sin renunciar a los compases más clásicos. Pero que el flamenco tiene su mejor muestra esta semana con el XI Festival Caja de Madrid a celebrar en el teatro Albéniz. José Menese, La Macanita, El Cigala o Carmen Linares, a la que se le otorgará el premio de este año, aparecen como los cantaores más interesantes entre tocaores como Tomatito, o Niño Josele y bailaores como Farruquito o Javier Barón.

- Canciones, raíces. De nuevo el sindicato CC OO emprende una nueva edición de Cantando a la Luz de la Luna, que se desarrollará todos los viernes hasta finales de marzo en el teatro de su sede central. Lo inicia el valenciano Raimon con su espectáculo Animal d'esperance i memoria, que acaba de mostrar en Bosnia. Rodrigo Leâo expone en el Círculo de Bellas Artes toda la belleza y sensibilidad que atesora su música, tal y como viene haciendo aun antes de abandonar el grupo portugués Madredeus. En el mismo lugar, Manu Dibango, una de los máximos exponentes de la cultura africana en Europa, acude al ciclo Cerca de África, que también cuenta con cine y otras actividades. Luis Camino, la otra parte de 21 Japonesas, debuta en solitario; David Tavares vuelve a juntar la música brasileña de su país con el flamenco; el guitarrista invidente Gladston Galliza lleva también los ritmos brasileños al Central, lo mismo que sus paisanos Zum Zueh al Suristán para luchar por la tasa TOBIM. Además, Djanbutu Thiossane hacen sonar otra vez sus djembes senegaleses y Wafír sirve la musica de su país, Sierra Leona.