‘Joost’ es tele en Internet
Los fundadores de Kazaa y Skype se unen para ofrecer televisión de verdad (y gratis) a través de la Red. Y dicen que funciona
Gratis, y desde cualquier parte
No se habla de otra cosa. Dejaron Kazaa después de convertirlo en uno de los programas P2P más usados del mundo. Fundaron un servicio de telecomunicaciones vía Internet (eso que llaman voz-sobre-ip) que llamaron Skype, y que luego vendieron bastante bien a eBay. Y por fin, después de meses de anuncios, Niklas Zennstrom, Janus Friis y Frederik de Wahl presentaron ayer Joost, el que debería ser, en sus planes, el primer servicio mundial de televisión de alta calidad a través de la Red. De momento es sólo una Beta, pero promete televisión a pantalla completa con calidad de señal igual a la de la televisión tradicional. Las primeras emisiones para el gran público serán gratuitas y con anuncios, y entre sus contenidos habrá deportes, documentales y música. Nada nuevo, de momento, excepto el canal por el que se transmitirá.
Netflix vuelve a sorprender
Seguimos con los contenidos audiovisuales para hablar de otro servicio on-line, Netflix, que muchos dicen que será el encargado de poner el último clavo en la tapa del ataúd del negocio tradicional de videoclubes. Bien, en realidad esta compañía nació en 1998 y se hizo famosa por darle la vuelta al negocio del alquiler de video: uno elige la película en su web, y un mensajero la trae a casa para que la vea, y la recoge cuando ya lo ha hecho. Adiós a los paseos hasta el videoclub del barrio para descubrir que la película que uno quiere ya está cogida (¡como todos los sábados!). Un negocio ingenioso -y desconocido en España-, del que ya estaban pronosticando su muerte hace cuatro años. En el siguiente paso, que es el que Netflix acaba de dar, la compañía incluye en la cuota mensual la capacidad de descargar la película y verla directamente en el PC. Eso sí, sólo se han metido en este catálogo virtual 1.000 títulos de los 70.000 que tiene la compañía en sus almacenes.
El peor momento para dejar de auscultarnos
La culpa la tiene Marte. Resulta que en los próximos cinco años, la Tierra va a perder el 40% de todos los sensores que la observan, por antigüedad, a falta de su reemplazo por la agencia aeroespacial estadounidense NASA. Poco importa que en el Ártico estén apareciendo islas como setas debajo del hielo, o que en Moscú tengan este invierno una temperatura media 16º por encima de la histórica. La administración Bush se ha lanzado a invertir, dicen, para poner un pie de Homo Sapiens Sapiens sobre el planeta rojo, mientras el azul se derrite. No es, desde luego, el mejor momento para quitarle el termómetro a eso que algunos llaman Gaia. A no ser que ya se de por perdido al paciente. Echamos la persiana por hoy con una buena noticia para otros enfermos, los estadounidenses: dentro de un mes tendrán a su disposición un programa on-line para extender recetas. Y es que la mala caligrafía, también, puede matar.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.