Le Pen pide la "abstención masiva" en la segunda vuelta de las presidenciales francesas

El líder ultraderechista Jean-Marie Le Pen, que se quedó en cuarta posición en la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas el pasado 22 de abril, ha pedido a sus votantes, 3,85 millones en la primera vuelta, que se abstengan "masivamente" en la segunda ronda, en la que se disputarán la presidencia el conservador Nicolas Sarkozy y la socialista Ségolène Royal.

El gran derrotado de la primera vuelta de las elecciones, consciente de la pérdida de influencia de su Frente Nacional, con el que se colocó finalista junto a Jacques Chirac en las presidenciales de 2002, anima a sus votantes a "tomarse la revancha" en los comicios legislativos, que se celebrarán en el mes de y que califica de "esenciales para Francia".

Para Le Pen, que obtuvo un 10,44% de los votos en la primera ronda, por detrás de Sarkozy, Royal y el centrista François Bayrou, sería "peligroso" votar a la candidata socialista, mientras que hacerlo por Sarkozy sería "insensato". El líder ultraderechista ya anunció el pasado 22 de abril, tras conocer los resultados de la primera ronda, que aprovecharía su tradicional discurso del 1 de mayo ?en el que la extrema derecha francesa celebra el día de homenaje a la "heroína y santa nacional" Juana de Arco y la izquierda celebra el día del Trabajo- , para posicionarse de cara al duelo final por el Elíseo, que tendrá lugar este próximo domingo.

En un acto ante sus simpatizantes en la céntrica plaza de la Ópera Garnier de París que ha calificado como su "primer discurso de la campaña legislativa", Le Pen ha clamado que "no debemos tener ninguna responsabilidad en la elección del 6 de mayo", en referencia a los votantes del Frente Nacional. Su discurso incluye reproches al "atraco" del candidato conservador Sarkozy, al que acusa de haber robado los temas clásicos del FN para ganar electores por la derecha, por lo que no se le puede votar. Pero tampoco se puede apoyar a Royal, ya que la candidata socialista "regularizaría a los clandestinos".

Por ello, Le Pen invita a sus seguidores a que "se reserven" para las Legislativas del 10 y 17 de junio para lograr en esos comicios una "legítima venganza". Ha dicho que tiene una "esperanza razonable" en esas elecciones, pues está convencido de que recuperará al casi millón de votantes que perdió el pasado 22 de abril con respecto a 2002, pérdida por la que ha dicho sentirse "decepcionado y apenado".