25 años sin Grace Kelly

Tal día como hoy, hace un cuarto de siglo que falleció trágicamente Grace Kelly, actriz y princesa de Mónaco y una de las mujeres más populares del siglo XX. Apenas tenía 52 años cuando un ambiguo accidente, en la sinuosa carretera que conduce a Montecarlo, empezó a forjar su leyenda. Estefanía, su hija menor, viajaba con ella.

Veinticinco años después de su fallecimiento, la princesa sigue acaparando portadas y en el principado de Mónaco ya han empezado los homenajes a su figura, que fue el punto de partida, gracias a su glamour y su estilo, de la expansión de la pequeña capital mediterránea. En el Grimaldi Fórum de Montecarlo, donde la actriz ya tiene con su nombre un teatro, una avenida y dos zonas de jardines, se puede visitar desde el 12 de julio la exposición "Los años de Grace Kelly". La muestra da un repaso por la vida de la princesa desde que dio sus primeros pasos en Filadelfia -nació en 1928- hasta que asumió su papel de madre con sus hijos, verdaderas estrellas de la prensa rosa: Carolina, Alberto y Estefanía Grimaldi.

Grace Kelly comenzó a forjar su leyenda con míticas actuaciones, como la que protagonizó en 1955 junto a Cary Grant en "Atrapa a un ladrón". Desde ese momento, el ascenso en su carrera como actriz fue meteórico, hasta que en 1954 consiguió el Óscar a la mejor actriz por "La angustia de vivir".

Después de este éxito, Grace amplió considerablemente su presencia en las portadas de las revistas de estilo y moda, a lo que se trabajo como musa de Givenchy, quien diseñó su vestuario para su histórico encuentro con la familia Kennedy en 1961.

El 19 de abril de 1956, Grace Kelly se casaba con Rainiero de Mónaco en la catedral monegasca de San Nicolás. La boda fue retransmitida por las televisiones de todo el mundo y el enlace fue considerado como la "boda del siglo", junto a las posteriores de Carlos de Inglaterra y Lady Di. Desde ese momento, la princesa Grace comenzó su nuevo rol de madre de sus tres hijos, Carolina, Alberto y Estefanía. Veinticinco años después, el mito de Grace sigue más vivo que nunca, y hoy un ejército de fans recuerda con dolor la muerte de la reina del estilo.