Una red vendió Viagra falsa por Internet a 50.000 europeos
Alemania busca en Mallorca a los cerebros de la organización
La justicia alemana cree que en Mallorca se esconden los tres cerebros de una red delictiva -dos ciudadanos americanos y un británico- acusados de estafar a más de 50.000 personas de toda Europa vendiéndoles medicamentos falsificados (básicamente, Viagra y pastillas para adelgazar). La causa penal por esta masiva estafa la instruye un juzgado de la localidad alemana de Saarbrücken (capital del Estado de Sarre, cerca de la frontera con Francia).
Los acusados ganaron 12 millones de euros con el supuesto fraude
La justicia alemana sospecha que los tres cerebros de la red residen y se esconden en diferentes municipios de Mallorca. Por ello, reclama a España que se les detenga y se dicte contra ellos prisión preventiva con vistas a una futura extradición. El proceso judicial que Alemania abrió en 2005 contra los cinco miembros de la red (dos de ellos, ya detenidos y condenados) es por estafa y por vulnerar las leyes del medicamento y de patentes.
Según fuentes de la investigación, los acusados -contra los que ya existe una orden de busca y captura internacional- obtuvieron ilícitamente cerca de 12 millones de euros vendiendo por toda Europa estos falsos medicamentos. Lo hacían a través de Internet. En concreto, lograron poner en el mercado miles de cajas de pastillas con falsas etiquetas de Viagra y Cialis (para tratar la disfunción eréctil) y de Reductil y Xenical (para adelgazar). Los acusados montaron una compleja red de empresas distribuidoras y colaboradoras para despachar los pedidos que les llegaban a Alemania desde prácticamente todos los países europeos.
Según las mismas fuentes, los tres acusados que se buscan en la isla de Mallorca responden a las iniciales de Richard A., Peter B. y Charles S. Éstos montaron toda esta trama para enriquecerse de forma rápida y sin escrúpulos. De hecho, en apenas dos años, entre 2002 y 2005, recaudaron cerca de 12 millones de euros. La justicia alemana, donde la red tenía su centro de operaciones, sí pudo localizar en su momento a dos miembros de la organización -de nacionalidad alemana- cuya misión, dentro de la red, era preparar los pedidos de medicamentos para su distribución a través de las citadas empresas. Estos dos ciudadanos alemanes ya han sido procesados y condenados en Alemania a penas de tres años de prisión por distintos delitos. Los otros tres huyeron, siempre según los citados medios. Las declaraciones de los ya procesados han permitido a los jueces alemanes conocer el alcance real de la estafa y los nombres de los cerebros de la trama, que están huidos de la justicia y se cree residen ahora en Mallorca.
Los miembros de la red hacían llegar por correo electrónico a millones de europeos ofertas para la adquisición de medicamentos relacionados con la disfunción eréctil y el adelgazamiento. Los interesados pagaban por adelantado en las direcciones que les indicaba la red. Y, apenas una semana después, recibían la medicación en sus casas, en discretos paquetes, y por un precio módico. Eso sí, los obtenían sin receta y al margen de la red pública asistencial. No tenían que ir al médico de cabecera a solicitar la viagra. En España y casi todos los países europeos la prescripción de este tipo de medicamentos ha de hacerla un médico tras estudiar la compatibilidad de los mismos con el estado de salud del interesado.
Las etiquetas de los fármacos eran falsas. Las elaboraba la propia red en ordenadores. A pesar de que en las cajas de pastilla aparecía la marca viagra o reductil, en realidad se trataba de medicamentos parecidos pero con algunos componentes diferentes, señalan los citados medios.
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