El entierro de una mujer viva
El informe que la Universidad de Burgos le envió a Teófilo Goldaracena después de la exhumación de la fosa donde yacía su abuela dice que es bastante probable que la enterraran viva, ya que el tiro "entra y sale por la mandíbula". Ángela Rodrigo estaba embarazada cuando recibió aquel impacto de bala, el 19 de agosto de 1936.
Según testimonios orales, los falangistas la violaron delante de su marido, que fue enterrado en la misma fosa. Tras rescatar sus cadáveres en Aranda de Duero (Burgos), su nieto decidió que haría cuanto estuviera en su mano para recuperar a otros. Hoy le ha enviado a Garzón un listado con los nombres de 3.920 víctimas en Navarra y la posible ubicación de sus cuerpos. Casi 400 de ellos murieron en el Fuerte de San Cristóbal, donde se produjo en 1938 la mayor fuga penitenciaria de España: 795 lograron huir, a 237 "los mataron a tiros por el monte, como conejos mientras trataban de escapar", explica Goldaracena. 132 más murieron de hambre y de frío atrapados en aquella prisión años después.
La investigación ha sido especialmente difícil en Navarra, territorio "hostil" al juez que medita admitir a trámite las denuncias. "Aquí no les gusta Garzón. Y en Euskadi, menos. Por eso ninguna asociación de allí se ha personado en la causa. Yo he tenido muchos problemas para conseguir los datos. Muy poca gente quería colaborar en algo que va a acabar en manos de Garzón", explica Goldaracena.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.