Nueve empresas compiten por hacerse con el bus turístico en Madrid
Entre las aspirantes, siete UTE y dos empresas, se encuentran Viajes El Corte Inglés, Alsa, Auto Res, Pullmantur y Globalia
El Ayuntamiento de Madrid ha dado esta mañana a conocer las ofertas que han presentado distintas empresas para la concesión del autobús turístico, que en la actualidad gestiona el propio consistorio a través de la Empresa Municipal de Transportes, de manera provisional tras la finalización del contrato y la trifulca con Madrid Visión. Siete de los nueve aspirantes son uniones temporales de empresas (UTE) y solo dos compiten en solitario, RJ Autocares y Esfera Bus. Entre las aspirantes se encuentran empresas potentes como Viajes El Corte Inglés, Alsa, Auto Res, Pullmantur y Globalia. Se calcula que la nueva concesionaria estará funcionando en torno al mes de junio. Hasta entonces, el Ayuntamiento se seguirá haciendo cargo del servicio, que regresó a las calles el pasado 31 de enero tras 28 días de ausencia.
La primera de las UTE está formada por City Sightseeing, una multinacional de origen español con autobuses turísticos en multitud de ciudades de todo el mundo (como Londres, Washington, Ámsterdam, Berlín y 10 ciudades españolas), que se presenta con Compañía Hispalense de Tranvías, Pullmantur y el gigante del transporte por carretera Auto Res. La segunda UTE la conforman Autocares Vilar, S.A, Viajes Reina y Neoturismo. La tercera es Empresa Ruiz y Viajes Transvía Tour. La cuarta, Julià Travel -Grupo Julià gestiona autobuses turísticos en, por ejemplo, Barcelona, Marrakech y México DF.-, Alsa y Transportes Bacoma. La quinta, por Terravisión España, Terravisión Transport, Alivisión Trasnport y Dionisio Montoya del Amo. La sexta la forman Viajes El Corte Inglés y Autocares Esteban Rivas. La séptima, Autobuses Urbanos de Lugo, Empresa Monforte, Castromil, Globalia -grupo al que pertenecen, entre otras marcas, Air Europa y Viajes Halcón- y Transportes Chapín. Cierran la lista RJ Autocares y Esfera Bus, que se presentan ambas en solitario.
Un pliego de condiciones duro
El pliego de condiciones es duro. Establece que la flota de vehículos estará compuesta por, al menos, 19 vehículos de menos de un año de antigüedad y un aforo de 70 pasajeros sentados. Fuentes del sector calculan el precio de cada autobús en unos 250.000 o 300.000 euros, así que la inversión inicial en este apartado tendrá que estar, tirando por lo bajo y si todos los buses son nuevos, en casi seis millones de euros. El Ayuntamiento exigirá además un canon fijo anual de 1.050.000 euros, más un variable: el 3,5% de la cifra de facturación bruta anual hasta nueve millones de euros, y si la facturación supera esa cifra, el 4,5%.
Los autobuses deberán estar dotados de audioguía en ocho idiomas y el intervalo de frecuencias mínimas en temporada alta (de marzo a octubre) será cada 10 minutos. La comercialización y el servicio de atención al cliente corren a cargo de la empresa. El precio del nuevo servicio será de 20 euros, 2,8 más que ahora. El concurso público se resolverá hacia el mes de marzo, por lo que la nueva concesionaria se haría con el servicio en julio. Entre las que se han presentado al concurso está una de las dos empresas que gestionaban los autobuses turísticos de Madrid. Es el socio minoritario (Grupo Julià), que tenía el 40% de Madrid Visión -el otro 60% era de Trapsa-. El contrato para gestionar los autobuses rojos de dos plantas es, además de una posibilidad de negocio importante -más de 475.000 personas lo usaron en 2009-, un escaparate estupendo para quien logre la concesión. No en vano Madrid recibió casi ocho millones de visitantes en 2010, y la imagen de marca puede subir muchos enteros para la empresa que se encargue de mostrar Madrid a los turistas.
La concesión a los autobuses de Madrid Visión, que pagaba casi un millón de euros al año al consistorio en concepto de canon, acabó a principios de enero y desde entonces el servicio quedó suspendido, inmerso, además, en una polémica por el estado en el que la UTE concesionaria hasta entonces, de la que formaba parte Gerardo Díaz Ferrán, devolvió los autobuses al consistorio, y por las dudas acerca de si transitoriamente prestaría el servicio la EMT o no.
El 31 de enero volvieron finalmente a las calles, conducidos por la EMT y con algunas deficiencias. Actualmente hay solo siete autobuses (frente a los 28 de antes) recorriendo las dos rutas que realizan los autobuses turísticos. Cuatro de ellos cubren la línea 1 (Madrid histórico) y tres discurren por la 2 (Madrid moderno), lo que ha provocado que la frecuencia de paso sea de 20 minutos. Con la anterior concesionaria el intervalo variaba entre los ocho minutos del verano y los 15 del invierno, según la información de Madrid Visión. También ha cambiado la preparación de los guías que acompañan a los turistas en el recorrido. La empresa es la misma, Lan Center, pero a los trabajadores ya no se les exige ser diplomados en Turismo. El mismo 31, se anunció la convocatoria del concurso, que hoy ya tiene candidatos.
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