El TSJ levanta la suspensión cautelar del plan Rabassa
El polémico proyecto prevé 13.503 viviendas en la periferia de Alicante
El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana ha acordado levantar la suspensión cautelar decretada sobre el plan Rabassa, según han confirmado fuentes oficiales del Ayuntamiento de Alicante. El plan Rabassa es el proyecto urbanístico más ambicioso y polémico de Alicante, que prevé la construcción de 13.503 casas en la periferia norte de la ciudad.
El plan urbanístico, adjudicado al contratista local Enrique Ortiz, fue aprobado definitivamente por el Consell en mayo de 2009, pero meses después, el proyecto fue suspendido de forma cautelar por el TSJ mediante un auto dictado el 9 de diciembre a raíz de un recurso de la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana. El Ejecutivo esgrimió que el proyecto no tenía garantizado el abastecimiento del agua y que se había tramitado al margen del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).
La sala dio la razón al Gobierno en las dos cuestiones: sobre la reserva de agua, señaló que no está "especificado ni determinado" cómo se van a obtener los 5,5 hectómetros que la nueva zona urbana necesitará al año. Y respecto a la planificación, el auto primó los criterios de sostenibilidad y aseguró que "no es aceptable" una reclasificación de suelo no urbanizable como plantea el plan fuera del PGOU.
El Ayuntamiento de Alicante apeló la suspensión cautelar. El recurso del consistorio ha sido aceptado, según han señalado fuentes municipales. No obstante, la sala todavía no ha comunicado oficialmente la resolución. El levantamiento de la suspensión del plan supone un balón de oxígeno para la alcaldesa, Sonia Castedo, del PP, y su intención de ubicar en el PAI un Ikea.
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