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Rubalcaba exige a Rajoy que aclare sus promesas de empleo

Candidato y Gobierno, en contra de reducir gasto social

Luis R. Aizpeolea

El candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, exigió ayer, desde Sevilla, explicaciones al líder del PP, Mariano Rajoy, sobre la anunciada pretensión del responsable de comunicación de este partido, Estaban González Pons, de crear 3,5 millones de empleos en la próxima legislatura. Rubalcaba aprovechó esta salida por la tangente de González Pons, amortiguada posteriormente por la dirección del PP, para reafirmar su estrategia de campaña: "Por respeto a los votantes vamos a decir lo que vamos a hacer y cómo pretendemos financiarlo". El portavoz del Gobierno, José Blanco, atribuyó la posición de González Pons a su "desconocimiento del tema" que se traduce en "demasiados vaivenes electorales" en el PP durante la precampaña.

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Rubalcaba reabrió ayer un segundo frente de debate con el PP, el del déficit. Se comprometió a cumplir el compromiso de reducción del déficit sin rebajar los gastos sociales, especialmente la educación y la sanidad, en contraste con lo que están avanzando algunas de las comunidades autónomas gobernadas por el PP, tras las elecciones del 22-M. "Para nosotros, cumplir el compromiso del déficit es una obligación para salvaguardar las políticas sociales. Para el PP es el pretexto para reducir gasto social o privatizar". El ministro portavoz, José Blanco, reafirmó la posición de Rubalcaba desde el Gobierno socialista al comprometerse a no realizar ningún ajuste social en lo que queda de mandato, pese a las convulsiones financieras.

El candidato socialista salió, también, al paso de las insinuaciones del PP de regresar a las políticas económicas que practicaron en 1996 cuando ganaron las elecciones por vez primera. Rubalcaba dijo que era "imposible". Recordó no solo que la coyuntura era distinta -"había crecimiento económico"- sino que, también, lograron 40.000 millones al "privatizar las joyas de la Corona" y lanzaron la burbuja inmobiliaria, que "no solo ya no es posible" sino que, además, "es una de las causas de la situación en la que ahora nos encontramos en España".

Rubalcaba (izquierda) y Griñán, ayer en Sevilla.
Rubalcaba (izquierda) y Griñán, ayer en Sevilla.JULIO MUÑOZ (EFE)

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