Rubalcaba alerta de que ETA prepara un secuestro "en un sector significativo"

ETA baraja un secuestro para recuperar "la notoriedad de la que ahora carece". La voz de alerta la dio ayer el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien situó como posible objetivo de la banda a "sectores significativos desde el punto de vista social". Eludió dar más detalles. Ni fechas, ni posibles escenarios. Sólo avanzó que el Gobierno ha alertado de esta posibilidad a las personas amenazadas, "para que nadie baje la guardia" pese a la situación de aparente calma, y que ha extremado ya las medidas de seguridad encaminadas a garantizar su protección.

El ministro lanzó la advertencia durante su visita a la localidad vizcaína de Erandio, donde analizó junto al consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, la situación de ETA. Las sospechas están fundadas. El origen no es otro que la situación de "debilidad operativa" que atraviesa la banda "debido a la presión policial, judicial e internacional", así como a su aislamiento social y a una división interna "cada vez más evidente". Una fragilidad que, según Rubalcaba, necesita desmentir ante sus seguidores y la opinión pública mediante un "atentado espectacular".

La organización terrorista busca la "notoriedad de la que ahora carece"

Frente a una gran matanza, la posibilidad de retener a uno o varios rehenes emerge con más fuerza. España encara la presidencia de la Unión Europea durante el primer semestre de 2010 y, como advirtió ayer el ministro, a ETA "le ha gustado siempre estar presente en el panorama internacional". Un secuestro parece la fórmula más apropiada de permanecer en el candelero público sin derramar la sangre que dinamitaría el delicado proceso de reflexión interna que afronta la izquierda abertzale sobre el apoyo o no a la violencia. El eco mediático de los recientes casos del atunero vasco Alakrana y del grupo de cooperantes catalanes en Mauritania avala esta opción.

En el contexto de alarma se enmarca el acuerdo de colaboración firmado ayer por los Gobiernos central y vasco para facilitar la coordinación entre el Cuerpo Nacional de Policía, la Ertzaintza y la Guardia Civil en materia antiterrorista. La iniciativa pretende que las distintas fuerzas de seguridad compartan datos y estrategias de actuación contra la banda, así como información instantánea de operaciones en curso.

Rubalcaba argumentó ayer que, pese a su debilidad aparente, "el riesgo" de que la banda intente matar "siempre existe". En este sentido, alertó incluso de que "una ETA débil puede ser mucho más peligrosa e imprevisible que una ETA fuerte". Advertencia de la que se enteró la Asociación Española de Escoltas a través de los medios de comunicación, lo que mereció su crítica. "Nos estamos jugando la vida y merecemos toda la información", lamentó su presidente, Vicente De la Cruz.