El PSOE convoca a los grupos para ver su voluntad de pacto contra la crisis

El Gobierno quiere recuperar la iniciativa política contra la crisis económica antes de la comparecencia del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Congreso, el miércoles, para rendir cuentas del momento actual. El próximo movimiento va a ser convocar por separado a los grupos de oposición en el Parlamento para compartir un temario contra la crisis. La tarea corresponde al portavoz del Grupo Socialista, José Antonio Alonso, por encargo de Zapatero.

El Rey apeló ayer a la unidad para superar "juntos" la crisis y recuperar "cuanto antes" un "cremiento fuerte y duradero".

La primera cita de Alonso será el próximo martes con el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, cuyo grupo ha querido colocarse de árbitro entre PSOE y PP con la propuesta de alcanzar un pacto de Estado contra la crisis, del que de momento ambos grupos sólo han emitido señales de disconformidad. Además, el Grupo Socialista considera que esa tarea le corresponde a él por ser el grupo mayoritario. Aunque las posibilidades de acuerdo no son muchas, el Gobierno quiere poner sobre la mesa las iniciativas que están en marcha para explorar qué opina la oposición sobre ellas. En el fondo quiere forzar al resto a que digan qué ofrecen para salir de la crisis.

El muestrario que José Antonio Alonso prepara empieza por el recorte del gasto público en 50.000 millones de euros, durante los próximos tres años, para reducir el déficit. Menos concreta será su oferta sobre la reforma laboral, ya que ésta recae de lleno en el ámbito de responsabilidad de los agentes sociales. "Se trata de que el Parlamento declare su apoyo a la negociación que llevan adelante la patronal y los sindicatos", señalan fuentes socialistas.

En efecto, el Gobierno no oculta su máximo interés en resaltar el trabajo de los agentes sociales. "Si CEOE y sindicatos pactan una reforma laboral, será muy difícil que se opongan los grupos parlamentarios, de derecha, de izquierda o nacionalistas", prevén los interlocutores. Con ese ánimo los socialistas preparan una proposición no de ley, que someterán al resto de los grupos para que apoyen el acuerdo sobre salarios alcanzado el pasado viernes por los agentes sociales. En estas conversaciones se pondrá también sobre la mesa "el comienzo del debate sobre las pensiones", aunque todos saben que la negociación concreta se hará en el Pacto de Toledo. La estrategia y la Ley de Economía Sostenible y el Pacto por la Educación completan el temario.

Ahora bien, la decisión de llevar adelante esta iniciativa encierra otro propósito más allá de alcanzar acuerdos concretos. "Se trata de convencernos todos de que no podemos someter al país a un nivel de dramatismo como el alcanzando los pasados días, que después queda en casi nada". Ésta es la explicación que trasladan quienes conocen el trasfondo de la decisión de abrir esta ronda.

El Gobierno y las direcciones parlamentarias y del PSOE quieren trasladar a la opinión pública la imagen de que las fuerzas políticas son capaces de discrepar con normalidad y por ello el país "no está al borde del abismo".

En este contexto las fuentes consultadas sitúan la petición que ayer hizo el rey Juan Carlos. "Es hora de grandes esfuerzos y amplios acuerdos para superar juntos, cuanto antes, las graves consecuencias de la crisis, y para recuperar un crecimiento fuerte y duradero, cada vez más basado en la ciencia y la formación", señaló el monarca en el acto de entrega de los Premios Nacionales de Investigación 2009.