El PSOE acusa al PP de dañar a España por su afán de desgastar al Gobierno
Cospedal urge a "hacer reformas" para demostrar que hay diferencias con Irlanda
Socialistas y populares mostraron ayer sus divergencias sobre qué significa para cada uno de ellos ser patriota. "Ser patriota es decir la verdad a los españoles, plantear reformas y no escurrir el bulto", aseveró la portavoz parlamentaria del PP, Soraya Sáenz de Santamaría. "No hay oposición más irresponsable en Europa que la del PP español; ante la duda y las dificultades, los populares siempre se sitúan contra los intereses de España; no le importa hacer daño al país", proclamó la portavoz del comité electoral del PSOE, Elena Valenciano. El día anterior, los dirigentes socialistas en su reunión de la ejecutiva trasladaron al PP la petición de que tuviera "patriotismo" en un momento tan delicado.
"No hay oposición más irresponsable en Europa que la del PP español"
"Ser patriota es decir la verdad a los españoles, no escurrir el bulto"
Este fue el bucle del que no salieron ayer socialistas y populares sobre un asunto de extrema gravedad como es la situación de Irlanda, rescatada necesariamente por la Unión Europea, y el temido efecto de contagio que pueda tener sobre España. Tanto Sáenz de Santamaría como Dolores de Cospedal, secretaria general del PP, y el responsable de Economía de los populares, Cristóbal Montoro, se intercambiaron dardos muy afilados con José Antonio Alonso, portavoz del Grupo Socialista, y Elena Valenciano.
Pero lo cierto es que mientras que el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, exhortaba a que no se hicieran declaraciones dispares desde el mundo político, sus actores parlamentarios no cesaron. "Ser antipatriota es no querer hacer reformas por tener miedo a los electores y a las urnas y seguir en el Gobierno cuando no se sabe cómo gobernar". Con esta explicación de la popular Sáenz de Santamaría del porqué se critica al Gobierno en materia económica se llega al meollo de la estrategia del PP: "Se necesita un Gobierno que lidere, creíble y que haga reformas".
Aunque en la reunión del lunes de la ejecutiva del PP la mayoría de las intervenciones caminaron por la senda de la "prudencia", ante la caída de Irlanda, y la posibilidad de que España vaya detrás, la actitud de la plana mayor del PP, un día después, no fue esa. "El Gobierno tiene que demostrar que no es Irlanda", condicionó la dirigente del PP Dolores de Cospedal. "El PP está en una carrera alocada para hacer daño a España", decía el responsable autonómico del PSOE, Gaspar Zarrías. Desde el Gobierno, el titular de Trabajo, Valeriano Gómez, y el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, trataban de infundir tranquilidad con la reiteración de que España está cumpliendo con sus obligaciones.
El rifirrafe continuó por las dos partes: el PP pide reformas en la Administración, en el sistema energético y en el mercado laboral, enumeró Montoro. Están ya en marcha, responden los socialistas, "y el PP lo sabe", en voz de la portavoz socialista en el Senado, Carmela Silva, para quien el PP "practica la kale borroka política".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.