El Gobierno se vuelca para asegurar el voto de CC y UPN

El Gobierno ha mantenido ya contactos durante el mes de agosto con Coalición Canaria y UPN (Unión del Pueblo Navarro) para asegurarse sus votos en el debate de totalidad de los Presupuestos, según fuentes de ambos partidos.

La votación de Presupuestos, pese a su dramatismo, no es ni mucho menos la más difícil de salvar para los Gobiernos, porque basta mayoría simple. Es decir, es suficiente conseguir la abstención de varios grupos si se tienen más votos a favor que en contra, sin necesidad de llegar a la mayoría absoluta. Por eso, los tres votos que pueden aportar CC y UPN pueden ser importantes para que el PNV se limite a abstenerse, sin necesidad de apoyar expresamente las cuentas.

El voto de UPN está asegurado cada año, a cambio de que los socialistas navarros hagan lo propio en la comunidad foral. Y fuentes de CC explican que ya ha habido reuniones preparatorias, pero fructíferas, con el Gobierno durante este mes.

"Antes que acordar el futuro, había que pactar el pasado", aseguran para explicar que antes de perfilar los Presupuestos lograron salvar las inversiones en Canarias del recorte decretado por el Gobierno. Con las inversiones en infraestructuras salvadas, la negociación para las cuentas de 2011 puede avanzar.

Lista de peticiones

Según CC, esta vez la negociación es diferente a la de otros años, porque no pueden incluirse los acuerdos vía enmiendas, con posterioridad al debate de totalidad, sino que deben asegurarse en el proyecto de Presupuestos que aprobará el Consejo de Ministros antes de final de septiembre. Esos acuerdos, según CC, deberían pasar por planes de empleo específicos para las islas, medidas fiscales, política energética, inversiones para Canarias y apoyo al sector turístico. Esa lista de peticiones ha sido ya expuesta por CC al Gobierno para esa negociación.

Esos contactos, que tuvieron lugar durante el mes de agosto tendrán continuidad la próxima semana, antes de que el Gobierno apruebe el proyecto de ley de Presupuestos.

Con los otros partidos del arco parlamentario no hay negociaciones abiertas, porque ya han manifestado su decisión de no sumarse al acuerdo de Presupuestos, al menos al genérico del debate de totalidad. Por ejemplo, los partidos de la izquierda minoritaria -IU, ICV, ERC y BNG- podrían cerrar acuerdos concretos, pero están lejos, por ejemplo, de la fiscalidad.