Detenido en Buenos Aires el abogado huido Rodríguez Menéndez

El abogado José Emilio Rodríguez Menéndez, que estaba huido de la justicia tras fugarse durante un permiso penitenciario, fue arrestado este jueves por la tarde en el barrio de Palermo, una zona residencial de alto poder adquisitivo de Buenos Aires. Rodríguez Menéndez estaba en busca y captura desde que no regresó el pasado 22 de agosto a la cárcel coruñesa de Teixeiro -en la que cumplía una condena por defraudar a la Hacienda Pública- tras un permiso de cuatro días. En el momento de ser detenido, cuando salía de su residencia, el letrado iba acompañado de su esposa, Vanessa Palomar, y no ha opuesto resistencia. Ella sí que ha increpado a los agentes.

La vivienda que ambos ocupaban estaba alquilada por la cuarta esposa del abogado, han informado fuentes de Interpol argentina. Rodríguez Menéndez estaba más delgado que en las últimas apariciones suyas en España e iba afeitado para pasar desapercibido. La policía le ha trasladado a una comisaría de la capital argentina y las autoridades han intentado llevar a cabo una vía rápida de expulsión pero ésta no ha sido posible, por lo que su regreso a España tendrá que seguir los cauces habituales del convenio de extradición vigente entre los dos países una vez que las autoridades españolas soliciten su entrega.

El abogado se presentará hoy ante el titular del juzgado federal número 8 de Buenos Aires, el magistrado Marcelo Martínez de Giorgi, quien le informará de los cargos por los que es buscado por la justicia española.

Rodríguez Menéndez llevaba tan sólo cinco días en Argentina, tras refugiarse en distintos puntos de Paraguay y Brasil desde su fuga. Los agentes que llevaron a cabo la operación habían estrechado el círculo sobre el abogado en Paraguay, su anterior destino, pero esperaron a que abandonara esta país para poder detenerlo en otro como Argentina, con el que España tiene suscrito un Tratado bilateral de extradición.

La esposa del abogado quedó en libertad tras la detención, mientras que Rodríguez Menéndez pasará la noche en las dependencias del Departamento de Investigaciones de la Policía Federal argentina en calidad de detenido.

Periplo judicial

El letrado consiguió en España un permiso de un juez de vigilancia penitenciaria al que había recurrido la negativa de la Junta de Tratamiento de la cárcel de autorizar su salida durante unos días. El abogado había solicitado este permiso tras cumplir una cuarta parte de la condena, condición indispensable para poder disfrutar de este beneficio. La Junta de Tratamiento de la prisión negó el permiso porque consideraba que existía riesgo de fuga -como al final se demostró- y por la diversidad de delitos por los que había sido condenado. Así que Rodríguez Menéndez salió de la prisión de Teixeiro el 18 de agosto.

Otro dato de la rocambolesca escapada fue que el abogado, ya en la calle, se sacó el pasaporte en una comisaría de Madrid el 19 de agosto. Rodríguez Menéndez no podía salir de España pero logró el pasaporte probablemente porque en los ordenadores policiales no constaba que por orden judicial se le había retirado.

El letrado fue detenido en mayo de 2006 para cumplir una condena de dos años que le impuso la Audiencia Provincial de Madrid por la difusión de un vídeo de carácter sexual relacionado con el director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, pena que fue confirmada por el Tribunal Supremo. En octubre de 2006, el Supremo aumentó de seis a diez años de cárcel la condena que le había sido impuesta también por la Audiencia de Madrid por un delito continuado contra la Hacienda Pública entre 1990 y 1994.

El último rastro que dejó este abogado tras su huida fue en Asunción (Paraguay), donde estuvo hospedado en un hotel a finales de agosto, según informó entonces un canal de televisión del país suramericano.

Investigación por el permiso concedido

El permiso penitenciario concedido por el juez a este preso motivó que el Servicio de Inspección del Consejo General del Poder Judicial abriera una investigación. El objetivo del Poder Judicial es averiguar si el titular del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de A Coruña, Javier San Claudio Piñón, cometió alguna falta disciplinaria al conceder el permiso en contra de la opinión de la Junta de Tratamiento de la cárcel de Teixeiro.