Unos 200 chatarreros se manifiestan contra la ley de residuos

"Chatarra sí, impuestos no". Con este grito unos 200 chatarreros se han manifestado hoy en Madrid en la primera protesta del sector en la historia española para censurar la nueva ley de recogida de residuos que prohíbe la recogida de hierro, cobre y otros metales en la calle. El lema de la marcha: "La ley de residuos nos obliga a robar. La basura es lo único que tenemos, no nos la quitéis".

"La nueva norma dejará sin comer a miles de familias", ha asegurado entre aplausos el portavoz de la Plataforma de Chatarreros de la Comunidad de Madrid, Lisardo Hernández, quien ha atribuido a la legislación "oscuros intereses recaudatorios". Hernández ha pedido a la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, "la derogación de la ley" y ha amenazado con acampar frente a la sede del ministerio si no se retira la norma.

La ley, que entró en vigor el pasado 28 de julio, entiende que todo producto férreo que se encuentra en la calle es de propiedad municipal. Esta consideración impide la labor que desarrollan cientos de personas que consiste en recoger material de hierro o cobre de obras, calles, descampados o basureros para luego venderlo a las chatarrerías.

La consejera de Presidencia y Justicia de la Comunidad de Madrid, Regina Plañiol, ha anunciado que analizarán cuáles son las peticiones de los chatarreros y el margen de maniobra del Gobierno regional.

"Estamos dispuestos a escuchar las manifestaciones y las opiniones que nos hacen todos los ciudadanos, especialmente aquellos que puedan sentirse más directamente afectados por normativas de esta materia",

ha señalado la consejera durante una visita a las Brigadas de Seguridad Ciudadana de San Lorenzo de El Escorial.

La marcha, respaldada por la Federación de Asociaciones Gitanas Cali (FAC) ha partido a las diez de la mañana desde la plaza de Cibeles y ha terminado en la Consejería de Medio Ambiente. Una vez allí se ha leído un manifiesto para pedir al Gobierno central que anule la ley y al regional que ralentice su aplicación "lo máximo posible". Solicitan, además, a las fuerzas de seguridad que no inicien "una caza de brujas" contra este colectivo.

Lisardo Hernández critica también que a las chatarrerías habituales ya no se les permite comprar este tipo de productos al por menor, lo que obliga a los vendedores a conseguir una licencia de técnicos transportistas de residuos sólidos no peligrosos y transformarse en empresas o autónomos con el respectivo pago del Impuesto de Actividades Económicas. "La ley merma los únicos ingresos de miles de madrileños que llevamos muchos años recogiendo chatarra. Sin previo aviso,nos aplican la ley y nos abocan a la nada", indica.

Plañiol ha matizado que es la recogida de chatarra es una actividad que se va regulando "cada vez más" y ha considerado que es "demasiado pronto" para saber si se pueden estimar las reivindicaciones de los chatarreros.