"Internet solo necesita inversión"

Endo Nobuhiro preside desde abril pasado NEC, una de las mayores corporaciones tecnológicas e industriales de Japón, que fabrica desde móviles, hasta baterías para coches eléctricos y redes de telefonía fija e Internet. Sin embargo, su prioridad ahora es la computación en la nube (cloud computing), campo en el que firmó un acuerdo estratégico con Telefónica en su reciente visita a España.

Pregunta. ¿Cómo le ha afectado a NEC, con inversiones en sectores tan dispares, la crisis financiera? ¿Ve pronto una recuperación?

Respuesta. A partir de 2009, se ha notado un frenazo en las inversiones en tecnologías de la información como en las redes de telecomunicación, tanto de empresas como de operadores. El desarrollo de soluciones de cloud computing, donde vamos a invertir 1.200 millones de dólares en dos años, y la expansión en mercados extranjeros, que ahora solo representan el 18% de nuestra facturación, serán claves en esa recuperación.

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P. ¿Por qué es tan importante el mercado chino?

R. Por la escala del país y por su influencia en el resto de países asiáticos. Nos hemos propuesto duplicar nuestra facturación hasta 2012.

P. ¿Y no temen que los chinos dejen de ser meros fabricantes y se conviertan en competidores o incluso compren las multinacionales japonesas?

R. Lo importante de una empresa es la capacidad de creación de valor, la competitividad. China es una amenaza porque es muy grande y muy fuerte económicamente pero eso no quiere decir que vaya a derrotar siempre a empresas como NEC, que tienen una historia detrás y que han sabido adaptarse y crear soluciones propias. No se puede competir en el campo de batalla de los chinos por volumen y precio. Hay que hacerlo en el campo del valor.

P. Pronto la mayoría de los usuarios accederá a Internet por el móvil. ¿Hay tecnología para atender esa demanda o se producirá una saturación como predicen algunos operadores?

R. Es cierto que la tendencia es que la conexión final sea inalámbrica, bien por wifi o móvil, pero nunca la parte fija va a desaparecer. Siempre será una combinación. El grueso de los datos circulará por la red fija de fibra y cuando lleguemos casi al punto final del usuario la conexión será inalámbrica. Disponemos de soluciones tecnológicas como las fentoceldas o el LTE (Long Term Evolution). Así que el Internet del futuro no tiene ningún problema tecnológico, solo hace falta inversión

P. Operadores como Telefónica se quejan de que invierten mucho en red para dar cobertura a los proveedores de contenidos como Google o Yahoo, que no invierten nada, y se llevan todos los beneficios.

R. Y llevan razón. Hasta ahora había una segmentación muy clara entre red y servicios. Pero los proveedores como Google están saliendo de su órbita creando, por ejemplo, sistemas operativos, y los operadores también desean entrar en la parte de servicios. Y eso es lo que, por ejemplo, estamos haciendo con Telefónica.

P. NEC se ha centrado en el cloud computing. ¿Todos los programas en el futuro estarán en la nube?

R. Es difícil contestar a esa pregunta pero está claro que cada vez más va a haber un mundo de datos electrónicos interactuando entre ellos y eso tiene una potencialidad muy grande. Por ejemplo, los coches electrónicos remitirán datos e interactuarán con el sistema de control de tráfico, de forma que se puedan prevenir accidentes. Hay una multitud de servicios que van a funcionar en la nube, pero ¿todos? Es difícil saberlo.

P. NEC ha firmado un acuerdo para el diseño de baterías para coches eléctricos con Renault y Nissan. ¿Para cuándo serán competitivas en autonomía con los motores de gasolina?

R. El uso eficiente de energía y la carencia y carestía del petróleo van a hacer que los coches eléctricos e híbridos ganen cuota de mercado y acaben imponiéndose. NEC quiere estar presente en este segmento. En efecto, la batería es la parte crítica. Pero hay muchos avances y pronto será competitivo. Por ejemplo, el Leaf de Nissan, que saldrá al mercado en noviembre, tendrá una autonomía de 160 kilómetros y una velocidad de 140 kilómetros por hora.

P. NEC, Casio e Hitachi han firmado una alianza para convertirse en el primer fabricante de móviles en Japón. Sin embargo, en muchos mercados, como en Europa, su presencia es testimonial.

R. Con la telefonía GSM tuvimos una fuerte presencia en Europa, pero cuando llegó el 3G no supimos reaccionar. Los teléfonos dependen de la cultura del usuario y obviamente son diferentes en Europa o en España que en Japón. Esas diferencias culturales es lo que nos han impedido mantener esa presencia. Ahora, los terminales están cambiando. Y se han reducido fundamentalmente a dos tipos: los que se usan para llamar y los de datos, los smartphone. NEC se va enfocar en esta última gama, que es la que tiene mayor potencial y vamos a reconquistar el mercado europeo. Preparamos un prototipo de smartphone para el año que viene.

P. ¿El móvil pues es el aparato prioritario en su porfolio?

R. Es importante pero no el único. Y además de móviles, NEC va a centrarse en distintos terminales de datos para el sector financiero, la salud, máquina a máquina, donde somos líderes.

P. El iPad ha desatado la fiebre de las tabletas. ¿NEC también se va a sumar a ello?

R. Tenemos planes en ese segmento porque, en efecto, creemos que va a abrir un mercado nuevo también en Japón, pero no va a sustituir a los netbook, en el que tenemos una cuota de mercado del 60%.

P. Y en televisión, ¿es inevitable el 3D?

R. Es una tendencia y el mercado va hacia allí, y no una moda. Seguramente dentro de poco, el 3D se verá como algo normal y se popularizará como las pantallas planas, porque tiene muchos usos y aplicaciones como los videojuegos. En Japón no paran de salir modelos. Y hasta están comenzando a comercializarse las primeras grabadoras de vídeo en 3D.

P. ¿Cómo es el balance del acuerdo con Telefónica?

R. La relación se basa en el cloud computing. La adjudicación de la plataforma de SaaS (software como servicio) de Telefónica comercializado bajo la marca Aplicateca y el despliegue de servicios cloud en Latinoamérica están resultando todo un éxito. Ahora hemos reforzado esa relación con un acuerdo para el desarrollo del puesto de trabajo virtual, por el que sus clientes empresariales puedan acceder tanto a su escritorio remoto visualizado como a aplicaciones de ofimática a través de cualquier aparato, desde un smartphone hasta un PC. -