Marta Domínguez y Zulema Fuente Pila se meten en la final de 3.000 obstáculos

Marta Domínguez y Zulema Fuenes-Pila estarán el domingo en la final olímpica de 3.000 metros obstáculos tras obtener, la primera con gran autoridad, su clasificación en la primera ronda, que dejó fuera a la barcelonesa Rosa Morató. Esta última no pudo con el ritmo infernal que impuso la plusmarquista mundial, la rusa Gulnara Galkina, en la primera serie, rompiendo la carrera desde su comienzo con un kilómetro a 3:02.63. Por ese punto la española iba decimotercera y en los dos miles restantes no mejoró más que un puesto. Terminó duodécima con 9:45.33, a diez segundos de su mejor marca de este año.

En la segunda, Zulema Fuentes-Pila disfrutó de un ritmo más sosegado, hizo una carrera en progresión y en el último kilómetro recuperó posiciones hasta llegar, apretando los dientes, a la cuarta, de acceso directo a la final, y con la mejor marca de su vida (9:29.40). Marta Domínguez corrió la tercera y última serie con el aplomo que la caracteriza, sin perder nunca el sitio junto a las mejores. Su clásica cinta rosa se pudo ver siempre en el grupo de cabeza, primero de siete atletas seleccionadas al ritmo que impuso la búlgara Ekaterina Volkova, cuarta en la lista mundial del año. A cuatro vueltas del final el primer grupo, siempre con Marta, se redujo a cuatro y ya no fue necesario hacer más dispendios. Aun así, la palentina llegó segunda con un tiempo de 9:22.11, sólo un segundo por encima de su récord de España.

Estévez se queda fuera. Higuero y Casado, a semifinales

El atleta español Reyes Estévez no ha conseguido pasar de ronda en la prueba de los 1500 metros, después de que el catalán se viniera abajo en la última vuelta a la pista. Estévez, al finalizar la prueba ha confesado haber pasado una mala noche, lo que habría condicionado su rendimiento en la carrera de hoy. "He pasado la noche a 39 grados, aunque no quiero buscar excusas, la culpa es mía", ha sentenciado. El atleta español ha llegado en octava posición, en una carrera liderada por el francés Baala. Por su parte, Juan Carlos Higuero ha corrido mejor suerte al clasificarse para las semifinales de la misma prueba tras pasar por meta en la tercera posición. El burgalés ha reconocido al finalizar la carrera que se ha "encontrado mejor de lo que esperaba". "Normalmente suelo esprintar pero he visto que había unos metros de ventaja", ha explicado. Lo bueno es que el ritmo de carrera ha sido lento y eso ha provocado "menos cansancio" en los mediofondistas, aunque eso "siempre es arriesgado" pero "ya en semifinales todo cambiará", ha añadido el atleta.

A la clasificación de Higuero, se suma también la de Arturo Casado, que ha logrado el segundo mejor tiempo de su serie, solo superado por el sudafricano Deventer. Estévez ha sido el primero en salir a la pista del monumental estadio Olímpico pequinés para buscar las semifinales en carreras que clasificaban a los cinco primeros de cada serie y cuatro más por tiempos. El barcelonés ha corrido por fuera y atrás, sin hacer caso, como los demás, al tirón del viejo Vyacheslav Shabunin, que se fue diez metros por delante. El ruso pasó los 800 en 1:57.64 y fue alcanzado al penetrar en la última vuelta, pero súbitamente Estévez perdió la posición y al negociar la última vuelta, cuando los mejores apretaron, no encontró nada en las piernas. El único español en la final olímpica de Atenas 2004 quedaba eliminado en primera ronda. Ha sido octavo con 3:39.62, a cuatro segundos del francés Mehdi Baala. Higuero ha saltado al ruedo a continuación, en la segunda serie, junto al campeón mundial, el estadounidense Bernard Lagat. El burgalés se ha pegado a la cuerda en una carrera mucho más lenta y sin dueño que llegó a los 800 en 2:05.39. Al toque de campana Higuero se colocó mejor para respondes con solvencia al último tirón del keniano Asbel Kiprop, vencedor en 3:41.28.

El español ha llegado tercero en 3:41.70, justo por delante de Lagat, que no quiso desperdiciar energías. La tercera serie, en la que estaba Casado, ha salido de estampida pero al madrileño le bastaron 200 metros para colocarse arriba, a la estela del estonio Tidrek Nurme, que pasó los 800 en 1:55.88. Con la cuerda a buen recaudo, Casado ha mantenido a raya a sus adversarios y sólo ha aflojado en la recta cuando ha comprobado que nadie podía arrebatarle uno de los cinco puestos de acceso directo a semifinales. Se ha impuesto el sudafricano Juan Deventer en 3:36.32 por delante de Casado (3:36.42). El ritmo vivo de la tercera serie ha arruinado ya cualquier esperanza para Estévez de meterse en la repesca.