La vivienda libre cuesta ya lo mismo que a finales de 2005

Las estadísticas oficiales llevan meses dando el mismo mensaje: el precio de la vivienda sigue cayendo, aunque cada vez lo hace menos. El lunes reiteró esta idea el Ministerio de Vivienda con los datos que le aportan los registradores de la propiedad. El metro cuadrado de un piso en el mercado libre costaba en el primer trimestre 1.865,7 euros, un 4,7% menos que en el mismo periodo del año anterior. Es este un porcentaje que queda lejos de las caídas superiores al 8% registradas en 2009, pero que muestra que todavía hay margen para que continúe la cuesta abajo del valor del ladrillo.

Hay que remontarse hasta el último trimestre de 2005 para encontrar precios más asequibles que los actuales. Al menos en el mercado libre, porque las viviendas protegidas se encarecieron en el último año un 1,9%, hasta los 1.133,4 euros por metro cuadrado.

12 provincias experimentan alzas interanuales en el mercado libre

Pero, como les gusta recordar a los expertos, en el mercado de la vivienda las estadísticas se desdibujan cuando se trata de cifras globales. Es en el momento en el que se desciende a los detalles cuando los datos cobran más sentido. Y ahí se aprecia que una docena de provincias -Teruel, Cantabria, León, Palencia, Salamanca, Soria, Zamora, Albacete, Cuenca, Cáceres, Ourense y Melilla- ya están experimentando subidas de precios en términos interanuales. Son los lugares en los que, como recalcó ayer la directora general de Arquitectura y Política de Vivienda, el stock de viviendas empieza a desaparecer. Anunciación Romero señaló que los precios siguen "amortiguando" su caída, pero tampoco quiso anticipar el final de la crisis. "No estamos diciendo que el ajuste haya terminado", advirtió la responsable ministerial.

Y al observar la evolución en términos trimestrales se ahonda en esta idea de que el final del ajuste está aún lejos. Porque entre enero y marzo los precios cayeron un 1,4%, más que en los dos trimestres anteriores. Con este ahondamiento, se rompe la tendencia de que las caídas trimestrales fueran cada vez menores.

No comparten esta idea los empresarios del sector, que consideran que la estadística está ahora inflada y que las casas ya se han abaratado desde el inicio de la crisis más del 20%.

La directora general eludió cuantificar el efecto que las novedades fiscales tendrán en la compra de viviendas, aunque subrayó: "Este año es el momento porque hay condiciones muy ventajosas". La entrada en vigor del nuevo IVA a partir de julio, que elevará del 7% al 8% el tipo que grava la vivienda nueva, y la desaparición de las deducciones generalizadas para nuevas compras a partir de enero de 2011 hacen más atractiva la adquisición de inmuebles en el primer semestre del año.