Un sistema eléctrico dominado por empresas extranjeras
El cierre de la venta de Endesa por Acciona no anticipa la calma en el sector
El acuerdo de ruptura de Acciona y de la italiana Enel en Endesa, con un año de antelación sobre lo previsto (marzo de 2010), hace más visible el hecho de que buena parte del sistema eléctrico español está ya en manos de compañías extranjeras. Hidrocantábrico pertenece a la compañía pública portuguesa EDP; Viesgo está en manos del gigante alemán E.ON y Endesa ya es propiedad de la italiana Enel, participada también por el Estado. España queda, junto con el Reino Unido, en el lado de los estados europeos que apuestan por la liberalización del mercado frente a países como Francia, Italia y Alemania, que se han reservado importantes palancas de actuación pública en el sector de la energía.
La salida del grupo constructor Acciona de Endesa, con plusvalías importantes que rondan los 1.800 millones de euros, sigue a la anunciada venta de Unión Fenosa por parte de la constructora ACS al grupo Gas Natural. José Manuel Entrecanales (Acciona) y Florentino Pérez (ACS) se han movido con rapidez y acierto para obtener importantes ganancias aprovechando el momento de agitación que se vivió en 2007 en el sector energético. Ambos empresarios han aprovechado al máximo la coyuntura empresarial y política. Y han sabido recuperar sus apuestas antes de que la crisis las convirtiera en inciertas.
Con Endesa en manos italianas, la "potencia empresarial" española en América se reduce de forma importante. Endesa es la primera compañía eléctrica privada de América Latina, con intereses en Chile, Argentina, Perú, Colombia y Brasil. Para la política exterior de España, Endesa ha sido una baza importante durante años. Enel lo sabe. Recientemente, en la prensa chilena, el grupo italiano ha utilizado la figura de Don Quijote y Sancho Panza para ilustrar algunos de sus proyectos de futuro. El grupo italiano sabe que "lo español" es una baza a mantener al otro lado del Atlántico. Y sus directivos han reconocido que intentarán mantener esa ventaja.
El cierre de la venta de Endesa por Acciona, tras casi dos años de enfrentamientos con el accionista mayoritario italiano, no anticipa la calma en el sector. ACS, que controla un 12% de Iberdrola de forma directa e indirecta, quiere reforzar su posición en la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán. De forma descarnada, en Iberdrola se explica que Florentino Pérez quiere, únicamente, repetir la jugada que tan bien le ha salido en Fenosa. Pérez, por el contrario, explica la apuesta por Iberdrola en el potencial de negocio a largo plazo del sector. Tarde o temprano, el enfrentamiento entre Sánchez Galán y Florentino Pérez estallará.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.