Industria prepara una subida de la luz en torno al 7% para el mes de enero

La cuesta de enero de 2010 puede ser más cuesta que nunca, con subidas del recibo de la luz de entre el 7% y el 10%. El Ministerio de Industria ha enviado a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) una propuesta de orden por la que se revisan las llamadas tarifas de acceso eléctricas para subirlas una media del 14,23% a los clientes de baja tensión, la inmensa mayoría de los 25 millones de usuarios que hay en España. Las tarifas de acceso suponen algo más del 50% de la factura que pagan los acogidos a la tarifa de último recurso (TUR) -la gran mayoría- y son un buen indicador de por dónde puede ir la subida global del recibo mensual.

Para fijar la subida definitiva del recibo -que se revisa trimestralmente y que no se ha modificado desde junio- habrá que esperar a la subasta de energía que se celebrará el día 15 de diciembre. En esa subasta, las compañías ofertan precios para las puntas y picos de consumo del trimestre próximo. Fijado el precio del kilovatio, se calcula la otra mitad del recibo.

Sebastián recuerda a las eléctricas que nada impide que proyecten nucleares

Con los precios actuales, los expertos consultados esperan una ligera subida en el precio del kilovatio respecto a la última subasta celebrada en junio. Los precios podrían subir desde los 40 euros por kilovatio a entre 43-45 euros kilovatio. Con esos precios, la subida de la tarifa que paga la mayor parte de la población, a falta de la decisión política, podría superar el 7%. El porcentaje es muy superior al que se registró de media para las tarifas domésticas en enero y julio de 2009 (3,5% y 2% respectivamente).

Lo cierto es que pocos dudan de que la subida de la luz de enero será importante. Entre otras cosas porque Industria tiene que atender muchos frentes, todos ellos caros. La lista es larga: déficit de tarifa (12.000 millones en proceso de titulización para que los cobren las empresas); incentivos a las energías renovables (4.800 millones de euros); apoyo al sector del carbón (sobrecoste para el sistema de entre 700 y 800 millones, según la CNE) y obligación de que el desfase entre costes reconocidos e ingresos del sistema eléctrico desaparezca en tres años.

Es lo que tienen las matemáticas. Que tienen poca cintura. Así se explica que la propuesta de Industria sobre tarifas de acceso -con el ya mencionado aumento medio del 14,23%- coincida en buena medida con la que adelantó hace unas semanas la Comisión Nacional de la Energía. Este organismo propuso subidas de las tarifas de acceso de entre el 13,5% y el 18,6% para cubrir los numerosos y hondos agujeros del sistema.

Por otra parte, responsables de Iberdrola, Gas Natural, Unión Fenosa, y Enagas comparecieron ayer a puerta cerrada ante la subcomisión del Congreso de los Diputados para estudiar el diseño de la estrategia energética española para los próximos 30 años. En su comparecencia, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, pidió a los partidos políticos aprobar de forma urgente la planificación energética, dado que es "imprescindible para adoptar ya las decisiones de inversión y las acciones necesarias" con el fin de no poner en riesgo el suministro de energía en el futuro. Según Sánchez Galán, el sector eléctrico deberá invertir 110.000 millones de euros hasta 2030 para garantizar el suministro y advirtió de que, si España prescinde de la energía nuclear, la factura eléctrica deberá elevarse en unos 35.000 millones.

La exposición del directivo tuvo respuesta. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, replicó desde Oviedo, según Efe, al recordar que la vigente legislación española está "abierta" a la posibilidad de que se construyan nuevas centrales nucleares, una iniciativa a la que el Gobierno "no va a animar" a las empresas eléctricas que, ha recordado, "no han presentado ningún proyecto".