Imperial Tobacco eliminará 830 empleos en sus sedes de España

La multinacional Imperial Tobacco ha anunciado hoy la supresión de 2.440 empleados en toda Europa, de los cuales 830 afectarán a la plantilla que la tabaquera hispano-francesa Altadis tiene en España. En Francia, por su parte, se eliminarán los restantes 1.060 puestos de trabajo.

Imperial Tobacco, que cerró la compra de Altadis el pasado enero, presenta hoy sus proyectos en relación con la integración de la tabaquera Altadis a todos los centros de trabajo del grupo británico y de la compañía hispano-francesa de forma simultánea y que contempla, entre otros aspectos, el cese de producción de cigarrillos negros en Alicante y la concentración de la producción europea de cigarros en Cantabria.

En este sentido, fuentes sindicales han denunciado que el proyecto de supresiones de empleos y de cierre de dos fábricas en Francia -las de Estrasburgo y Metz-, que ha sido abordado en un Consejo de Administración, no está ligado a una bajada del consumo de tabaco, sino que se debe a que "los accionistas quieren más dinero". Gareth Davis, consejero delegado del grupo, ha asegurado que "los proyectos son un paso necesario en el proceso de integración de Imperial Tobacco y Altadis".

Logroño se potencia

Por lo que respecta a España, de los 830 empleos que Imperial suprimirá en España, sobre una plantilla total de 6.700 trabajadores, 520 pertenecen al área industrial, en las fábricas de Alicante, Cádiz y Palazuelo (Cáceres). El 80% de los mismos podrán acogerse a bajas por edad y el resto tendrá la posibilidad de trasladarse a otros centros de trabajo (Logroño o Cantabria), pero ninguno causará baja de manera forzosa. Los que no se acojan a la baja por edad recibirán la baja indemnizada y el apoyo de la empresa a través de un Plan de Recolocación Externa.

La planta de Logroño absorberá la producción de tabaco negro de Alicante, un segmento que bajó en los últimos diez años un 63% en España y un 70% en Francia. La fábrica riojana se convertirá por tanto en la única del grupo dedicada a la producción de cigarrillos en España, con una plantilla de 663 trabajadores, 89 más, y una producción de 33.000 millones de unidades.

Un "mazazo" y una "sangría"

La Federación Agroalimentaria de UGT ha rechazado el plan por la reducción de puestos que supone. Además, el sindicato ha asegurado que no descarta tomar medidas para evitar la "sangría" de puestos que supone la medida. La presidenta del comité de empresa de la fábrica que Altadis cerrará en Alicante, Encarna Riquelme, ha afirmado que la noticia es un "mazazo" y refleja que la empresa ve a los trabajadores "como a números". Riquelme ha explicado que el perfil de los empleados de la fábrica sobrepasa los 50 años, por lo que ha estimado que los cerca de 200 mayores de 52 años de los 338 afectados se acogerán a las prejubilaciones, aunque ha indicado que antes deberá negociarse la mejora de las condiciones.

Previo al inicio de la reunión, que está previsto acabe por la tarde, más de 500 asalariados del grupo se han concentrado hoy ante la sede parisina del grupo para denunciar el plan. El alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, ha mostrado esta tarde su preocupación por los trabajadores, por el golpe en la economía local y porque se cierra una fábrica que "es casi una institución en la historia de la ciudad". Alperi ha criticado que la decisión ya esté tomada sin posibilidad de negociar. La alcaldesa de Cádiz, Teofila Martínez, ha pedido a la Junta de Andalucía y al Gobierno central que se impliquen para evitar los 236 despidos anunciados en la planta gaditana de Altadis.

58 plantas en todo el mundo

Altadis, nacida en 1999 de la fusión entre la francesa Seita y la española Tabacalera, emplea actualmente a unas 2.200 personas en Francia. Por su parte, tras la adquisición de la compañía hispano-francesa, el grupo suma 58 plantas en todo el mundo (31 de Imperial y 27 de la tabaquera-francesa) y una plantilla de unos 42.000 empleados, de los que alrededor de 27.500 corresponden a Altadis.