Guindos advierte sobre la necesidad de ajustar el déficit público

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha asegurado hoy que es "clave" ajustar el déficit público en España ya que no solo afecta al Estado, sino "a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos fundamentalmente". Guindos ha declarado durante la celebración del I Foro de Sostenibilidad organizado por Ernst & Young que "España ganará credibilidad en el exterior" con un menor desequilibrio entre gastos e ingresos. "Además, debemos lograr que el coste de financiación sea más bajo y que los recursos lleguen al sector privado, que es el que crea crecimiento", ha explicado. El déficit público no fue del 6% al finales de 2011, sino de más del 8%, un dato que ya se preveía antes de acabar el año.

Guindos también se ha referido a las dos reformas que el Gobierno piensa elaborar a corto plazo, laboral y financiera. En referencia a la primera, ha apostado por "un incremento de productividad de las empresas". Los agentes sociales no alcanzaron la semana pasada el acuerdo que les había demandado el Gobierno, por lo que será el Ejecutivo el que aplique medidas que el ministro de Economía no ha detallado.

También ha hablado de la reforma financiera y ha explicado que "busca el saneamiento" del sistema. "Es necesario un plan de provisiones muy exigente para que las entidades limpien sus balances. Esto pasa por realizar fusiones, contar con menos agentes en un modelo más solvente y realizar mejoras en el gobierno corporativo", ha indicado en referencia a una revisión de los sueldos de los máximos mandatarios de las entidades financieras.

El precio del petróleo

El presidente ejecutivo de Repsol YPF, Antonio Brufau, ha señalado esta mañana que un aumento del 10% en el precio del petróleo supondría un retraimiento en la economía española de 4.500 millones de dólares (cerca de 3.500 millones de euros). Durante la celebración del I Foro de Sostenibilidad, el máximo mandatario de la petrolífera española ha advertido que el acceso a los recursos naturales será cada vez más costoso debido a la mayor demanda de los países emergentes y al aumento de la población global. Ante esta situación, se ha mostrado "pesimista" ante la posibilidad de apostar por la sostenibilidad en época de crisis.

El impacto económico en todo el mundo va unido, según sus declaraciones, a un impacto social. "Los grandes incrementos de precio llevan al desorden; un ejemplo lo vemos en la primavera árabe, que es un grito a la libertad precedida de la crisis alimentaria", ha afirmado. El acceso más difícil a los recursos "provocará que las zonas desfavorecidas sean cada vez más pobres". Para corroborar sus palabras, ha puesto un dato sobre la mesa: "Dar acceso a la electricidad a todo el mundo en los próximos 20 años supondría invertir 300.000 millones de dólares". Brufau ha apostado por un modelo de desarrollo "frugal, en el que se produce más por menos".