Almunia descarta sanciones por los déficit públicos

La primera salva de ayudas estatales contra la crisis humea aún y, a falta de comprobar su eficacia, se deja notar en las finanzas públicas. El comisario europeo de Economía, Joaquín Almunia, instó ayer a los países de la UE a elaborar "marcos presupuestarios creíbles a medio plazo". Y, ante la evidencia de que se ha vulnerado el límite de déficit público fijado por el Pacto de Estabilidad en varios casos, abogó por reconducir la situación antes que por el castigo.

"Aplicar el pacto en este momento no tiene nada que ver con aplicar sanciones, sino con estrechar la vigilancia para que las cuentas públicas vuelvan al equilibrio cuanto antes", afirmó Almunia en unas jornadas organizadas en Madrid por el Banco de España. La Comisión Europea ha abierto expediente a España y otros cinco países por haber acumulado un déficit que supera el límite del 3% del PIB. En el caso español, 2008 se cerró con un saldo negativo del 3,8% y el Gobierno espera que este año ronde el 6%. El comisario confirmó que "a partir de marzo", Bruselas fijará "unos plazos precisos" para que las cuentas públicas vuelvan a situarse dentro del acuerdo de Maastricht.

El comisario señaló que los diez años de unión monetaria dejan un "balance muy positivo" y algún problema sin resolver. "En algunos países se han acumulado importantes desequilibrios por cuenta corriente , pese a que las finanzas públicas gozaban de buena salud", enfatizó Almunia, y adelantó que Bruselas trabaja en ampliar su "ámbito de vigilancia más allá de la política fiscal antes de que se enquisten problemas de competitividad".

Frente a los que advierten del riesgo de que algún país de la zona euro se salga de la moneda única, Almunia aseguró que esa posibilidad es "igual a cero" y enfatizó que "el interés de otros países de la UE por entrar en la eurozona no deja de aumentar". El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, destacó "los problemas financieros que habrían enfrentado estos países si, en esta coyuntura, cada uno hubiese conservado su moneda". Fernández Ordóñez aplaudió la propuesta de Bruselas de crear un supervisor europeo, pero instó a crearlo "ya mismo" y no esperar tres años, como sugiere la iniciativa comunitaria.