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FÚTBOL | ESPANYOL

El conflicto Nakamura

El Espanyol ingresa dinero con el icono japonés pero el técnico no cuenta con él y el club busca comprador

La situación se está tornando insostenible. El técnico del Espanyol, Mauricio Pochettino, no cuenta en absoluto con él; la dirección deportiva le busca un comprador para rellenar las escuálidas arcas del club; el futbolista pretende una salida para llegar a tono al Mundial de Suráfrica, y el área de mercadotecnia se frota los ojos por la cantidad de dinero que se podría ganar pero que no se gana. Es el conflicto de Shunsuke Nakamura (Yokohama, Japón; 1978). "Existe un problema de comunicación, de adaptación", reveló Pochettino.

La contratación de Shunsuke, presentado en sociedad el día que se abrían las puertas del nuevo estadio y ante 8.000 aficionados, supuso un aluvión de ofertas extradeportivas. Desde agencias de viaje a marcas automovilísticas. Tsunami Nakamura, se le denominó en el club. Desde el área de mercadotecnia se cerró, entonces, un contrato televisivo con Wowow ?retransmite casi todos los partidos del Espanyol? y una gira japonesa con el promotor Sugimoto durante la primera semana de agosto -cuando lo permite la J-League-, con dos partidos y un beneficio para el club de unos 600.000 euros. El Espanyol, además, comercializaría una línea de productos del jugador en los días de partido, a través de carpas o puntos de venta en los alrededores del estadio.

Si Nakamura no estuviera en el Espanyol, sin embargo, esta gira se iría al garete. Entre otras cosas porque hay una cláusula en el contrato que estipula que el club no percibiría ni la mitad de lo fijado. "Y eso quizá no nos interesaría", señalan desde el club. Pochettino fue demoledor. "No dispongo de demasiada información, pero es cierto que en el Espanyol la necesidad económica supera cualquier tipo de necesidad". Responde Raúl Ciprés, encargado del área de mercadotecnia: "Para nosotros lo importante es que el jugador responda a las necesidades deportivas y que esté aclimatado. El mayor negocio es cuando un futbolista rinde y juega". Pero Nakamura no juega. Ha participado en 12 de los 21 partidos ligueros, ha sido titular en cinco y sólo ha completado tres.

Para Ramón Planes, director deportivo del Espanyol, no hay dudas. "Es un problema claro y contundente de aclimatación", conviene. "Las culpas de inadaptación son compartidas. Quizá el club no ha sabido encontrar la manera para que se adaptara", añade Pochettino. Pero el club le ha ofrecido, por ejemplo, varias veces un profesor de castellano. "No gracias. Está bien", respondió Nakamura, que no ha hecho ningún esfuerzo en aprender el idioma, del mismo modo que no se interesó por lo más mínimo en hablar inglés durante su estancia de cuatro temporadas en el Celtic Glasgow. También le ofrecieron que se cambiara de casa ?vive en una mansión de Sant Cugat sin su mujer e hijos porque se fueron a Japón al mes de llegar a España? y fuera a Diagonal Mar, con otros jugadores del equipo. "No gracias. Está bien", señaló. Desde el vestuario, en cualquier caso, no le critican. "Es educado, profesional y acata lo que dice el grupo sin problemas. Está comprometido", apuntan. Pero añaden: "No habla mucho...". Una situación embarazosa para Pochettino: "Es uno más de la plantilla. Nosotros trataremos de que esté cómodo, pero veremos qué piensa Nakamura".

Al club no le importaría venderlo. "No hay nadie intransferible", señalan desde el área deportiva. Shunsuke tiene un contrato por dos años y cobra 1,2 millones por temporada, cerca del tope salarial establecido por Tamudo y De la Peña. Es un precio alto en lo deportivo, pero no en lo económico. Resulta que gracias a su llegada, el Espanyol abrió negociaciones y vínculos por toda Asia y ya prácticamente ha cerrado el acuerdo del próximo patrocinador de ropa deportiva para las siguientes temporadas. Será Li-Ning. El club, para no perder ingresos, se plantea cederlo. "Cuando lleguen ofertas", responden del área deportiva. Lo cierto es que sí que llegaron dos propuestas: una del Middlesbrough y otra de Emiratos Árabes. "No gracias. Está bien", repitió Nakamura, que, una vez cerrado el mercado europeo, sólo se replantea volver a Japón.

Shunsuke Nakamura, durante un entrenamiento del Espanyol.
Shunsuke Nakamura, durante un entrenamiento del Espanyol.CARLOS MIRA

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