A Guardiola se le acumula el trabajo

El Barcelona viaja a Vila-real, donde esta noche (22.00, La Sexta y autonómicas) se juega media Liga con Messi y Bojan en la convocatoria, pero sin Pedro, Puyol y Maxwell, lesionados, ni Xavi, sancionado. Sin embargo, en la última comparecencia de Pep Guardiola antes del partido apenas hubo un par de preguntas sobre el envite. Y eso que en ese momento aún no habían trascendido las declaraciones del técnico azulgrana a Raisport, una cadena italiana, en las que afirmaba que sus días al frente del Barça están llegando a su fin.

El equipo se entrenó por la tarde en el Camp Nou, donde los jugadores recibieron la visita de Abidal, que sigue recuperándose de la operación que se le practicó hace unos días. A mediodía, Guardiola se pasó más de media hora hablando de la intervención de Sandro Rosell, que el jueves pronosticó un 5-0 a favor del Barça en la final de la Copa contra el Madrid. "Yo no lo habría dicho, pero cada uno es libre. Además, fue en tono solidario. Aunque se podría haber evitado perfectamente", razonó Guardiola, que recibió las explicaciones de su presidente por teléfono. "Ha sido modélico desde que salió elegido. No vengo a dar consejos a nadie, ni siquiera a mis jugadores. No conozco demasiado a Rosell, pero creo que es una persona sensata y coherente. No estoy aquí para hablar por él. Yo las he hecho mucho más gordas y tengo la sensación de que no volverá a hacer algo así. Uno aprende de los errores, pero hay materias inflamables y esta es una de ellas", argumentó el entrenador, que quiso remarcar el contexto en el que Rosell hizo la apuesta. "Yo habría dicho 60-0. De esta forma, ya no habría debate", bromeó. La osadía de Rosell también tuvo eco en el Madrid. "No me parece que haya faltado al respeto a nadie. No ha dicho nada del otro mundo, aunque, si soy yo el que lo digo, voy a cárcel", ironizó José Mourinho a media mañana.

Ya por la tarde, Raisport soltó unas declaraciones de Guardiola en las que el técnico, que hace menos de dos meses renovó su contrato por una temporada más (hasta finales de 2012), afirmaba en un vídeo que su etapa como técnico del Barça no se alargará demasiado, algo que, por otro lado, ya ha repetido varias veces. "Creo que mis días en el Barcelona están llegando a su fin. Este es mi tercer año y el que viene será el cuarto. Para una entidad tan grande como esta, es muy difícil mantener tanto tiempo al entrenador", sostenía Guardiola en unas declaraciones que el club considera robadas. El técnico accedió a conversar el miércoles con Raisport porque el encuentro debía girar exclusivamente alrededor del centenario del Brescia, club en el que militó cuando dejó el Barça (2001) y que es objeto de un DVD conmemorativo que produce Raisport.

El vídeo cobró ayer una dimensión insospechada por el papel que había jugado el técnico por la mañana, aunque va en la línea de lo que siempre ha manifestado Guardiola, amante de los contratos cortos -"si pudiera, renovaría cada seis meses"- y que siempre ha sostenido que no cree que su etapa como técnico del Barça vaya a alargarse muchos años más.