Coppola, otro que se pasa al 3D
El director remata 'Twixt now and sunrise', su incursión en el terror
El visionario de Francis Ford Coppola está cada vez más cerca de añadir una nueva dimensión a sus películas y sumarse al mundo del 3D.
Quiso hacerlo en Pinocho y en Megalopolis, dos de sus proyectos que nunca llegaron a ver la luz. Hoy la estereoscopía parece una realidad al menos en un fragmento dramático de su próximo estreno, Twixt now and sunrise. El filme, que protagonizan Val Kilmer y Elle Fanning, pertenece a la última etapa en la vida del maestro de El Padrino y Apocalypse now, decidido a ir de independiente, casi cine guerrilla, sin atender las cortapisas de los estudios.
Con este espíritu nacieron Juventud sin juventud y Tetro, y a juzgar por sus declaraciones sobre Twixt now and sunrise, este trabajo sigue la misma escuela, explorando las posibilidades narrativas de la última moda estereoscópica.
"Es una mezcla de algo personal, una historia de Halloween y un romance gótico. Si puedo presentarla como quiero será algo nunca visto", afirma el grandilocuente realizador a la revista Empire sobre un largometraje que escribió en dos días, fruto de una pesadilla, y es descrito como una película de género donde el terror y el suspense se dan la mano al narrar las tribulaciones de un escritor de novelas de horror. Twixt now and sunrise la ha rodado en su viñedo, es de época, y en estos momentos está montándola. La historia indicará al público cuándo ponerse las gafas porque -como ya indicó Coppola con anterioridad- su deseo es utilizar el 3D de forma dramática, no como "un truco barato" en esta historia de horror con tonos de "Hawthorne y Poe".
Coppola se apunta así a una dimensión en la que su amigo y compañero de promoción George Lucas ya es un veterano, con la futura saga de La guerra de las galaxias en 3D, adaptación que estos días rematan en su cuartel general. El tercero de este trío de genios, Martin Scorsese, también está rodando en estereoscopía el cuento infantil Hugo Cabret. "Es el mejor 3D que he visto hasta ahora", asegura a este diario el también director Kenneth Branagh tras ver algunas secuencias.
Coppola está seguro de que mira hacia el futuro. A punto de cumplir los 72 años, el admirado director también cita como fuente de inspiración a su hija Sofia, autora de Lost in translation o María Antonieta y parte de una nueva escuela de realizadores. Según sus declaraciones, es ella quien le ha enseñado a contar sus historias con menos palabras y más sentimiento y esa es su única regla en su cine: "Hacer películas bellas que lleguen al público".
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