Un joven y su novia reconocen haber matado y descuartizado a la madre de él

La pareja de Calafell (Baix Penedés) que mató y descuartizó a la madre de él ya duerme entre rejas. Víctor A. O., de 22 años, y su novia, Gema O. M., de 19 años, reconocieron ante el juez haber acabado con la vida de Carolina Ortiz, de 46 años de edad, en el domicilio familiar. Después, trocearon el cadáver, lo metieron en bolsas de basura y lo tiraron a un contenedor cercano a la vivienda, según informaron ayer fuentes cercanas al caso. Los investigadores de la Guardia Civil trabajan ahora para averiguar a qué hora y qué día fue recogida la basura y el ciclo que siguió, ya que no siempre se deposita en el mismo vertedero. Por el momento, se desconoce el móvil de este brutal crimen, aunque algunas fuentes apuntan a motivos económicos.

Los jóvenes se habían trasladado a vivir, a mediados de octubre, a una habitación de la calle de Emigdio Rodríguez Pita, en el núcleo marítimo de Segur de Calafell. En esta vivienda reside la hija de la propietaria, que acordó con los jóvenes que empezaran a pagar a partir del mes de noviembre. Sin embargo, "se negaban a abonar el alquiler y estaban todo el día dentro de casa, sin hacer nada o bebiendo cerveza", explicaron algunos vecinos.

"Algo muy gordo"

El pasado 4 de noviembre, la hija de la propietaria llamó a la Policía Local porque sus inquilinos se negaban a sacar de casa los numerosos muebles y trastos que habían llevado, procedentes del domicilio de la víctima. La mujer comentó a los agentes que la pareja "siempre se jactaba de haber hecho algo muy gordo por amor", una insinuación que llevó a tirar del hilo hasta determinar la presunta culpabilidad de Víctor A. O. y Gema O. M. en la muerte de la madre del chico.

La desaparición de Carolina Ortiz fue denunciada el día 6 de septiembre por una de sus hijas, hermana del detenido, que se extrañó de que su madre no regresara a casa. Durante estos dos meses, la Guardia Civil determinó que existían "suficientes indicios" para creer que la mujer no se había ido por propia voluntad, después de analizar sus cuentas corrientes y su vehículo. También se efectuaron dos registros domiciliarios en el entorno familiar de la víctima en Calafell, aunque el testimonio de la propietaria del piso donde residía la pareja fue determinante para esclarecer el caso y detener a los presuntos autores, el pasado lunes, 6 de noviembre.

Tras ser arrestados, los jóvenes confesaron ante el titular del juzgado número 3 de El Vendrell, en presencia de su abogado, ser los autores del homicidio de Carolina Ortiz, por lo que el juez ordenó su ingreso en el centro penitenciario de Tarragona. La investigación continúa abierta para el total esclarecimiento de los hechos y la localización del cadáver. Al parecer, la víctima y sus hijos residían desde hacía poco tiempo en Calafell, adonde habían llegado desde Barcelona.