Nueva brecha en el tripartito al pedir ERC que se reconozcan las consultas

Esquerra Republicana (ERC) abrió ayer otra brecha en el Gobierno de José Montilla. El partido republicano anunció que presentará en el Parlament una propuesta de reconocimiento institucional de las consultas soberanistas, valorando las que se celebrarán en febrero y abril. La moción busca ratificar otra en favor del derecho de autodeterminación aprobada por la Cámara en 1989 y confirmada en 1998. El Partit dels Socialistes (PSC) se ha distanciado de las "aventuras" secesionistas e Iniciativa-Esquerra Unida (ICV-EUiA) toma las votaciones como un toque de atención. "Los acuerdos deberían ser a tres", deslizó la portavoz ecosocialista Dolors Camats sobre una resolución que ignoraba y en alusión a la distancia entre los socios.

La declaración se debatirá en enero y agravará el difícil equilibrio del tripartito, que cierra el año más dividido que nunca. El Parlament reflejará desde hoy y hasta el viernes las distancias entre los tres socios: ERC se sumará hoy a una propuesta de Convergència de crear una zona de ámbito territorial del Penedès a la que se opone el PSC. Las tensiones seguirán mañana con la rebaja del impuesto de sucesiones, pactada por el PSC y ERC y que rechaza ICV. Y el viernes se debatirá la iniciativa legislativa popular (ILP) para prohibir las corridas de toros. Los dos socios minoritarios votarán por la prohibición y los socialistas darán libertad de voto a sus diputados, aunque se alinearán con el Partido Popular y Ciutadans en favor de una enmienda a la totalidad contra la ILP.

"El estropicio del tripartito con el tema de sucesiones es público", subrayó Oriol Pujol, portavoz de Convergència i Unió (CiU), sobre la reforma delcitado impuesto. Pujol insistió en que la federación votará a favor de la supresión del impuesto. "Montilla ha perdido la mayoría: que tome nota", dijo el diputado, que avisó de que ahora mismo la mayoría de la Cámara, con los votos de CiU y PP, está por la eliminación del impuesto y no por la rebaja que impulsan el PSC y ERC al margen de ICV.

Socialistas y republicanos vivieron ayer una jornada de negociaciones frenéticas con ICV en la que se llegó a divisar el acuerdo. "Estamos dispuestos a negociar siempre que se mantenga la justicia y la carga redistributiva del impuesto", avisó Camats. Los ecosocialistas dicen que no se dejarán presionar porque sólo piden que se equipare la rebaja a la de las comunidades socialistas que la han aplicado. La estrategia del Departamento de Economía es agotar las posibilidades hasta el último momento. Con todo, la diputada del PSC Carme Figueras avisó: "Votaremos en contra de la supresión del impuesto y trabajamos para llegar a un acuerdo. Y si ni una cosa ni otra se aprueban, la cosa se quedará como está".

Además de los presupuestos, el pleno aprobará un sinfín de reformas legales a través de la ley de medidas presupuestarias. Entre ellas, aumentar a un mínimo de 50 euros las multas por viajar sin billete en el transporte público. El Gobierno también modifica la ley de 2001 contra la contaminación lumínica con el objetivo de dar dos años más de plazo a administraciones y particulares para adaptar el alumbrado exterior.