Empúries 'viste' sus ruinas
La ciudad estrena un renovado foro romano para explicar cómo se vivía hace 20 siglos
"¡Niña! ¡Que me lo quitan de las manos!". Algo así, pero en latín, debían de gritar los mercaderes del foro de la ciudad de Empúries (Alt Empordà), fundada el siglo I antes de Cristo, para llamar la atención de las 5.000 personas que vivían allí en su época dorada. Y seguramente tendrían que decirlo muy alto para que los clientes les oyesen entre el barullo del lugar más importante de la ciudad romana: la plaza o foro.
Allí, además del mercado, se levantaba el templo religioso, que era el edificio más importante; la curia, donde se reunían los magistrados, y la basílica, donde se impartía justicia. Hoy son 10.000 metros cuadrados de piedras desangeladas. La Generalitat y el Gobierno central se han gastado 867.000 euros para lograr que las ruinas sean más evocadoras e inteligibles para el visitante.
Bajo la dirección de la arquitecta Lola Domènech, se han delimitado los espacios y se han recuperado los desniveles. También se han levantado columnas iguales a las originales para sugerir al visitante qué albergaban los restos, valiosos pero desnudos, que hoy pisa.
El consejero de Cultura, Joan Manuel Tresserras, inauguró ayer el nuevo foro y, además, puso la primera piedra de lo que será el centro de recepción para los visitantes. Estas obras costarán casi 1,9 millones de euros y está previsto que se acaben en 2012.
La Generalitat apuesta por Empúries como la "joya" cultural de la Costa Brava, según Tresserras. En 2008 se inyectaron seis millones de euros. Se pretendía llegar a los 500.000 visitantes; la cifra se ha quedado en 225.000, 25.000 más que antes de la millonaria inversión.
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