Denuncia por discriminar a inmigrantes en el acceso a créditos de consumo

Manuel Zafra, ingeniero técnico colombiano, sólo quería comprar un monitor para su ordenador. "El precio no era excesivo. Pensé que financiarlo a seis meses era una buena opción. Parecía todo sencillo". Pero Manuel, que tiene 38 años y lleva ocho en España, abandonó la tienda con las manos vacías y un cabreo monumental. La publicidad decía que sólo debía identificarse y dar su número de cuenta. Pero cuando le llegó el turno vio que a él le exigían algo más: "Resulta que tenía que darles copias de mis tres últimas nóminas y... ¡un contrato de trabajo firmado por el INEM!", dice.

Manuel pensó que había sido víctima de la publicidad engañosa. Pero no. Estaba ante algo más gordo. "La chica que me atendió dijo que las condiciones no eran las mismas para ciudadanos comunitarios y para extranjeros. Me dio mucha rabia. Me fui y compré el monitor al contado en otro sitio. Nunca he vuelto a comprar nada en esa empresa".

"¿Me han de pedir más garantías por ser colombiano?", protesta Manuel

El frustado cliente fue un paso más allá y denunció el caso a SOS Racismo, que lo elevó a la Agencia Catalana de Consumo. La asociación comprobó sobre el terreno la veracidad de la denuncia. "Es un caso de trato discriminatorio porque se exigen a los inmigrantes unos requisitos que no se piden al resto. La empresa da por supuesto que estas personas no tienen suficientes medios económicos o no ofrecen confianza", argumenta SOS Racismo.

La empresa denunciada es la popular cadena de electrodomésticos Media Markt. La compañía admite que los requisitos para acceder al crédito son distintos en función de la nacionalidad, una práctica comercial que, asegura, le disgusta. "No nos interesa que el cliente tenga esa imagen", señala una portavoz. La empresa matiza, no obstante, que las condiciones las fija la entidad financiera que opera en sus establecimientos, Cetelem. "No tenemos nada que ver con ellos. Sólo les cedemos un lugar en el local, pero ellos se ocupan de todo", justifica la cadena. Este diario ha comprobado que los requisitos exigidos en los locales de la cadena son distintos para europeos y extracomunitarios. "Debe presentar el DNI, la libreta del banco y la última copia de la nómina". Eso, en el caso de un español. ¿Y si la persona que va a pedir el crédito es extranjera? "Entonces tiene que traer también el contrato de trabajo sellado en el paro", según la explicación de los trabajadores.

Una portavoz de Cetelem señaló que la financiera "pide los mismos requisitos a todos los clientes, con independencia de su origen", y se desvinculó de las peticiones que se hacen en las tiendas de Media Markt. "El personal que hay allí no es nuestro. Nosotros gestionamos las peticiones por teléfono. Y pedimos lo mismo a todas las distribuidoras".

Media Markt asegura que está manteniendo conversaciones con Cetelem para "llegar a un acuerdo" y fijar otro tipo de criterios a la hora de financiar productos como la pantalla de Manuel. El hombre sigue perplejo y cree que la solución es sencilla: "Que den los créditos en función de la solvencia de cada cual, pero no de la nacionalidad. Yo tengo un buen trabajo y, por fortuna, no paso apuros económicos. ¿Importa que sea colombiano? ¿Me han de pedir por ello más garantías que a un español en paro?".