El preso común más antiguo del país afronta un nuevo juicio

Francisco Miguel Montes Neiro, considerado el preso común más antiguo de España, se sentó de nuevo ayer en el banquillo de los acusados. El juicio se celebró en Granada, donde se le acusa de fugarse en 2009 aprovechando un permiso que se le otorgó para que acudir al velatorio de su madre. Él, que lleva desde 1976 en prisión, lo negó y alega que se quedó dormido tras tomar un calmante.

La defensa del procesado, que ha pedido en más de una ocasión la unificación de sus condenas, considera que hubo por parte de los agentes "dejación de funciones" puesto que no se aseguraron de que el reo regresara a la cárcel. La Fiscalía,que pide nueve meses de cárcel, cree "rocambolesca" su versión y apuntó que, aunque fuera cierta, sería responsable de un delito de quebrantamiento de condena puesto que tendría que haber vuelto a prisión por la mañana y no fue detenido hasta un mes después. Montes Neiro lleva enlazando condenas 34 años.