Horas extras de 'Aída' en Turquía

Aída trabajará en Turquía para redondear su sueldo. Los chicos de Un paso adelante trasladarán a Rusia su escuela de baile. Los Serrano ya han abierto una taberna en Finlandia. Corso (Cuenta atrás) se lleva su unidad de policía judicial a Francia.

Las cadenas españolas (y los espectadores) exigen cada vez más calidad a las series de producción propia y eso obliga a las productoras a ajustar el presupuesto, lo que hace "muy difícil recuperar la inversión", reconoce José Huertas, director general de Imagina International Sales (ISS), distribuidora de Imagina (Globomedia y Mediapro). Así explica que ISS busque "rentabilizar" ese gasto exportando sus dramas y comedias a televisiones de todo el mundo.

Lo normal es que, de media, se recupere en el extranjero un 20% de la inversión inicial. Aunque en el caso de producciones como Un paso adelante -todo un fenómeno en países como Francia y Alemania-, el porcentaje sube hasta el 35 o 40%. Y hay operaciones en las que se gana hasta un millón de euros, como en el caso de Cuenta atrás, drama policiaco que la cadena francesa TF-1 compró antes de que lo estrenara Cuatro, el pasado mes de mayo.

En sus seis primeros meses de vida, ISS ha vendido su cartera a 30 países. En unos casos, se distribuye la lata (la serie acabada) y, en otros, el formato, que después adapta cada cliente. Entre los primeros, Rusia emitirá próximamente la versión original de Un paso adelante, drama musical que ya conocen espectadores de otras 20 televisiones -el éxito en la francesa M6 ha propiciado un segundo pase-, cinco años después de su estreno en Antena 3. Antonio Resines y Belén Rueda (Los Serrano) y Amparo Baró (7 vidas) también hablarán dentro de poco en ruso.

En Francia verán la lata de Cuenta atrás, el policiaco protagonizado por Dani Martín, tanto en abierto como en televisión de pago. TF-1, líder de audiencia en aquel país, la estrenará en 2008, y antes la descubrirá 13eme Rue, el canal hermano del español Calle 13, de Universal Studios.

Capítulo aparte merecen las adaptaciones de estas series que productores españoles y locales adecuan a los gustos de los espectadores de cada cadena. Géraldine Gonard, directora comercial de ISS, destaca el "interés creciente" de los países del Este por el producto español: cuenta con "buenos guiones" y se estructura en "muchos episodios", tan del gusto de aquellos consumidores, que han caído rendidos ante las telenovelas. En la parte negativa, la excesiva duración de cada capítulo en España, 70 minutos, lo que obliga a recortar unos 20 y reeditarlos.

La familia de Los Serrano ha extendido su árbol genealógico a la República Checa. Un paso adelante ha abierto una academia en Rumania, donde también se busca a tres policías desmañados que le den la réplica a Los hombres de Paco. Y Grecia y Turquía contarán con una Aída autóctona. José Huertas reconoce que, por ahora, entrar en el mercado estadounidense es "muy complicado". Pero adelanta que ISS está en "vísperas" de "cerrar un acuerdo" en el país de los maestros del género.