Una de romanos en Bonxe
Presos de la prisión lucense preparan trajes de época para la fiesta Arde Lucus
Todo está ultimado para que el fin de semana del 26 al 28 de junio Lugo viva su fiesta de Arde Lucus, en la que rememora su pasado romano. El centro histórico estará repleto de campamentos y sus calles aparecerán pobladas de senadores, patricios y celtas caracterizados para la ocasión. Lo que muy pocos sabrán es que una parte de esos trajes los confeccionaron con esmero, mucha dedicación y sacrificando horas de asueto, reclusos y reclusas del centro penitenciario de Bonxe.
Se trata de internos que están adscritos al Centro de Educación y Promoción de Adultos de la institución penitenciaria. Allí, hace tiempo que los profesores se dieron cuenta de que el alumnado prefiere realizar actividades de tipo manual, frente a las de carácter intelectual que se corresponden con los cursos reglados.
Los profesores del taller crearon una asociación para lograr subvenciones
La venta de los trajes permite recuperar los gastos de material
Los reclusos disponen de varios talleres, dos de ellos totalmente orientados a la gente que disfruta en el exterior de la evocación del esplendoroso pasado romano de la antigua Lucus Augusti, cuando era capital de la Gallaecia. Así, disponen de un taller de cuero y otro de vestimenta, donde unas 15 personas, muchas de ellas inmigrantes, confeccionan, cosen y bordan todo tipo de trajes y complementos. "Se trata de una forma de relacionar el mundo cerrado de dentro de la prisión con el exterior", sostiene el director del centro educativo, José Manuel Sánchez, lo que constituye una actividad "muy positiva".
La implicación de los internos es tal que dedican a la actividad "todo el tiempo del que disponen", e incluso han conseguido un permiso para dedicar su descanso del mediodía a trabajar en estas actividades. Hay alguno que lleva trabajo para su celda, fuera de lo que es el horario habitual, que va desde las 9.30 a las 13.00 horas y de 14.30 a 19.00 horas. De todas formas, Sánchez quiso remarcar que no se trata únicamente de una actividad especial con motivo de Arde Lucus, sino que constituye una forma de "motivar a los alumnos" que asisten regularmente a los distintos niveles educativos y, de paso, consolidar estas actividades con una justificación académica.
Para poder realizar los talleres, los profesores del centro crearon una asociación que lleva el mismo nombre que la página web en la que se pueden ver y encargar los trajes y complementos de romanos y celtas: www.debonxe.org. Ello les permite acceder a determinados tipos de subvenciones -aunque este año no pudieron conseguir ninguna-, vender los trajes sin ánimo de lucro y darle espacio legal a los esfuerzos de un grupo de personas que trabajan en el Centro de Educación de Adultos, que tiene consideración como tal desde el año 2007. Desde él se trabaja para la reeducación y reinserción social de los presos.
El sistema de trabajo en los talleres consiste en que los profesores compran los materiales y dirigen la actividad, y los alumnos elaboran los trajes y complementos, entre los que se incluyen las dos modalidades de espada romana, corta y larga, tallada en madera. Con la venta, lo único que se hace es recuperar los gastos de material, y lo poco que queda es para los internos como recompensa por el trabajo realizado.
En el taller de cuero se elaboran corazas, cinturones y sandalias de soldados romanos, senadores y patricios, siendo estas últimas las más demandadas de todas. Se trata de un proceso totalmente artesanal. Todo se confecciona a mano y los materiales son de piel de vacuno. Los seis alumnos son todos hombres y, básicamente, marroquíes, que ya acumulan cierta experiencia en este tipo de actividad.
El taller de vestimenta está integrado por nueve alumnos, seis de ellos mujeres. Los profesores dirigen el taller y buscan la documentación, a la que no pueden acceder los internos por tener prohibido el acceso a Internet. Aunque fundamentalmente se realizan trajes de mujer y procuran que no se repita ninguno, también elaboran vestimentas de emperador, distintos tipos de senadores, patricios o celtas.
Unas 15.000 personas han visitado la página web. Mediante este sistema recibieron cerca de 300 encargos que esperan poder atender, aunque también disponen de una lista de espera ante la imposibilidad cumplimentar toda la demanda.
Cada uno de los trajes tiene un precio medio de 30 euros, las sandalias sobre 50 y las corazas llegan a los 80 euros. Las peticiones llegan mayoritariamente de Lugo, pero también han registrado pedidos desde otros puntos de Galicia y Madrid.
Todo lo que se elabora se hace siguiendo una investigación previa y los internos presentarán sus trabajos a través de una obra de teatro que se celebrará en el centro penitenciario el próximo día 24, bajo el título de Una de romanos.
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