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Un juzgado sucio y peligroso

La Inspección de Trabajo denuncia las deficiencias en el edifico de Nules

María Fabra

Hace menos de un mes, la Inspección de Trabajo se presentó en los juzgados de Nules para comprobar las condiciones de seguridad laboral e higiene de los funcionarios en el palacio de justicia de esta localidad castellonense. El resultado ha sido un requerimiento a la Consejería de Justicia para paliar las deficiencias que son claramente sancionables si en lugar de un edificio público se tratara de una empresa privada.

La inspección se realizó a instancia del sindicato CSIF, al que los funcionarios han trasladado decenas de quejas por el estado de las dependencias.

La acumulación de expedientes, no sólo encima de las mesas sino también por el suelo, impide que "la limpieza puede hacerse con eficacia, por lo que es imposible mantener un mínimo de higiene", indicaron fuentes del sindicato, que agregaron que "es penoso trabajar en estas dependencias".

Los juzgados de Nules no tienen plan de evacuación y, de hecho, únicamente disponen de una única entrada que hace también de salida "por lo que en caso de producirse una situación de riesgo, la evacuación de los funcionarios sería muy complicada", tal como indicó el delegado sindical responsable de Justicia, Arturo Losada. Según explico éste, el edificio, que "nació pequeño", tiene actualmente 12 funcionarios más que cuando empezaron y hay una previsión de que la plantilla aumente. Con todo, el volumen de material ha provocado "una sobrecarga de los armarios archivadores y estanterías que podría causar el derrumbamiento de los mismos", mientras que el material de primeros auxilios no se revisa periódicamente y "está caducado".

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