La escultura de Ripollés dedicada a Fabra incumple la Ley de Contratos
La documentación se presentó un año después de la adjudicación al escultor
La escultura que honra a Carlos Fabra en el aeropuerto de Castellón se adjudicó al artista Ripollés sin la correspondiente autorización del consejo de administración de la empresa que gestiona la instalación aeronáutica y sin tener la documentación acreditativa de que el adjudicatario está al corriente de las obligaciones tributarias y de la Seguridad Social, requisito indispensable de la Ley de Contrataciones del Sector Público (LCSP). Esta documentación "se ha presentado con posterioridad a la adjudicación incumpliendo el artículo 130.1.c de la LCSP".
El informe de la Sindicatura de Comptes, que se ha hecho público recientemente, explica que el coste de la obra es de 300.000 euros, al tiempo que llama la atención sobre las irregularidades en la adjudicación de la escultura que pagará el Gobierno valenciano.
"Aunque el consejo de administración fue informado en fase previa y con anterioridad a la ejecución del contrato, no consta la aprobación expresa por parte del mismo que, de acuerdo con su importe, requiere la normativa interna, circunstancia susceptible de subsanación posterior", recoge el informe de la Sindicatura. En sus alegaciones, Aerocas se limita a informar de que "se ha dado cuenta del contrato en el consejo de administración del 28 de septiembre de 2011", un año después de la firma del contrato privado que se efectuó el 21 de junio de 2010, apenas unos meses antes de que Ripollés comenzara a levantar la escultura de bronce de 25 metros de altura y más de 20 toneladas en la rotonda de entrada del aeropuerto.
La Sindicatura también destaca que Aerocas tenía pendientes de pago 18,2 millones de euros a proveedores a fecha de 31 de diciembre de 2010 y apunta que la sociedad no informa de su cuantía ni de los retrasos en los pagos, pese a superar el plazo legal. En este sentido, la sociedad reconoce que acumula un aplazamiento superior al plazo legal, pero el Síndic recalca que este dato "no ha sido posible verificarlo al no disponerse de la información detallada suficiente".
La deuda a comienzos del pasado año era de 12,6 millones, por lo que se ha acumulado un 48% más a lo largo del ejercicio analizado. Junto al incumplimiento de informar sobre el periodo de pago, el informe destaca que "tampoco ha sido posible estimar los intereses devengados que deberían haber sido contabilizados por aplicación legal".
La Sindicatura constata que la sociedad pública Aeropuerto de Castellón (Aerocas) no ha aprobado el organigrama de su plantilla laboral a pesar de las reiteradas peticiones efectuadas en ese sentido. En el último informe vuelve a pedir su aprobación "a fin de clarificar las condiciones retributivas y laborales del personal al servicio de la sociedad". El pasado año el gasto en personal fue de 382.216 euros, casi lo mismo que en 2009. De este montante, 84.200 euros anuales corresponden al salario del director general: 42.100 euros por el desempeño del cargo de director general y otros 42.100 de complemento específico por dirigir la vigilancia y control de la obra, tal y como desvelaron las cuentas de la Generalitat aprobadas el pasado mes de septiembre. El resto se reparte entre otros seis empleados sin que conste más concreción en el informe.
Tras el requerimiento de la Sindicatura, Aerocas presentó alegaciones el pasado mes de octubre en las que asegura que ya puso a disposición del organismo fiscalizador una "plantilla definida, con un organigrama establecido y una asignación de funciones específicas para cada puesto de trabajo". Estudiada esta alegación, la Sindicatura reitera que su informe no indica que no haya una plantilla definida "sino que no consta su aprobación".
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