Educación admite que su oferta de líneas en valenciano es insuficiente

La Administración educativa reconoce que "en los últimos años ha crecido la demanda de los padres de creación de líneas en valenciano". Esto ha obligado desde el curso 2003-2004 a tener que autorizar 1.411 grupos de valenciano en otros 99 colegios e institutos más, con lo que "en la actualidad se puede estudiar en un total de 1.049 centros escolares, entre colegios e institutos". No obstante, fuentes de la Consejería de Educación admiten que, con los datos provisionales de preinscripción de matrícula, que se están revisando en este momento, la demanda de plazas públicas en valenciano desde los 3 años para el curso que viene rebasa la oferta actual.

Escola Valenciana denuncia al respecto que al menos 300 familias se han dirigido ya a sus servicios jurídicos para recurrir la falta de grupos en valenciano en colegios de Valencia, Elche, Alicante, Xàtiva, Paterna y Mislata. Según fuentes de la consejería, "se trata de casos concretos que se están estudiando y, en breve, se les comunicará la solución".

Hay una demanda potencial de 95.558 niños desde los 3 años a los 12 años

Sin embargo, la entidad cultural sostiene que "la demanda de grupos de valenciano en los centros de Infantil y Primaria supera el 55%", mientras que la posibilidad de estudiar en valenciano "solo está disponible de momento en el 43% de los colegios". Es decir, en 748 del total de 1.726 centros públicos y privados que hay en la actualidad.

Escola Valenciana y la Administración coinciden en los datos de la "oferta". Pero discrepan en la magnitud de la "demanda". Aunque la consejería admite que también en Secundaria ha crecido la demanda de manera sostenida desde hace cinco cursos. "A día de hoy hay 301 institutos con grupos en valenciano, lo que supone 42 centros más que en 2003-2004".

En la Comunidad Valenciana en total hay 3.532 líneas o grupos de valenciano, frente a las 2.121 de hace cinco cursos. "Es decir, 1.411 más, lo que supone un crecimiento del 66,52% más", concluye la consejería.

Pese a este incremento, la realidad es que los datos -centro a centro- en las grandes ciudades revelan una falta de planificación en colegios donde el curso pasado ya había saturación. Por ejemplo, el CP Cervantes de Alboraia, donde el alumnado de tres años que se ha quedado sin plaza de valenciano tiene dos opciones: estudiar en castellano en el mismo centro, o intentar encontrar plaza desplazándose hasta el CP Patacona, donde aún no se sabe si se autorizará una línea nueva o no.

Lo mismo ocurre en el CP Jacint Castanyeda de Xàtiva o en el CP Villar Palasí y el CP Sanchis Guarner de Paterna, dos centros que "históricamente" han demandado, sin éxito, otra línea.

Los padres se quejan de que esta "provisionalidad" lo único que consigue es "desincentivar a muchas familias que, al final, ante tantas dificultades, optan por que sus hijos se matriculen en castellano, con lo que los alumnos potenciales de valenciano se pierden por el camino".

Según la estimación de Escola Valenciana, de ampliarse la oferta al 55% de colegios, 95.558 niños de 3 a 12 años más estudiarían en valenciano. Ahora solo lo hacen 138.223.