JHAYCO: “No todo tiene que ser el maleanteo, no todo tiene que ser la calle”
El artista urbano puertorriqueño estrena ‘Le Clique: Vida Rockstar (X)’, su nuevo álbum después de tres años, una experiencia de 29 canciones que mezcla géneros y marca una nueva etapa en la vida y carrera de quien antes era conocido como Jhay Cortez
JHAYCO no quiere ser un reguetonero más. Con el álbum que estrena este viernes busca graduarse como rockstar. El proyecto, de doble disco y 29 canciones que cruza barreras e incorpora géneros nuevos al repertorio del puertorriqueño de 31 años, es un álbum conceptual, una experiencia en sí mismo: “Si cierras los ojos en este álbum, no vas a saber decir en qué track estás nunca”, asegura el artista.
Le Clique: Vida Rockstar (X) sale tres años después del último disco de estudio de quien antes era conocido como Jhay Cortez e incluye algunos de los sencillos más exitosos de su carrera. El álbum también es una pasarela de colaboraciones, con canciones hechas junto con Quevedo, Eladio Carrión, Peso Pluma, Yandel o DJ Khaled. En conversación con EL PAÍS, JHAYCO, que lleva a Puerto Rico a flor de piel, describe el proceso creativo y vital que lo han llevado en un trayecto desde los sonidos con los que creció en la isla hasta su obra más ambiciosa hasta el momento.
Pregunta. Ha hablado del álbum como una nueva etapa en su carrera, ¿en qué sentido?
Respuesta. Bueno, es mi primera producción como JHAYCO, no Jhay Cortez, hay que empezar por ahí. Este álbum me ayudó a encontrarme, a encontrar mi color, qué aporto al género, qué aporto a la escena, quién soy yo en el reguetón, en la música latina. Y yo soy el Rockstar. Fueron momentos bajos, momentos altos, momentos eufóricos, momentos lindos, tristes, y a través de estos tres años me pude desarrollar. Este álbum me hizo quien soy hoy, que es JHAYCO.
P. ¿Y qué es ser un rockstar en el mundo del reguetón?
R. Todo el mundo tiene una percepción supererrónea de los rockstars por todos los rockstars anteriores. Siempre son los más locos, alcohólicos, y yo pienso que hoy en día no es así. Hoy en día Post Malone, The Weeknd, son súper rockstars, y tú ves el amor y la apreciación de su arte, y el respeto que le tienen a su arte y a su fanaticada. Pa’ mi ser un rockstar es hacer todo lo que tú quieras y un poquito más. Obviamente, no tener una vida cotidiana, porque mi vida no es una vida normal. Por eso digo, todo lo que tú quieres hacer, todo lo que sueñas, el respeto que tú le tienes a tu arte, a tu pasión y un poquito más. Eso es rockstar.
P. ¿Cómo definiría el nuevo álbum?
R. Creatividad pura. Desde las transiciones, hasta las fases del disco; si cierras los ojos en este álbum no vas a saber decir en qué track estás nunca. Es un cuerpo de arte. Creo que se ha perdido mucho eso en los álbumes. Pienso que muchos álbumes que salen hoy en día son un conjunto de canciones, no son una experiencia. Por eso me tardé tres años. Siento que se ha perdido con todo esto de no dejarla caer, de los números, de sacar contenido, de la rapidez; también hay que educar a las personas de tomarse su tiempo para hacer algo bien hecho. Tres años me han dado para meter diferentes géneros, diferentes tipos de cosas como el dembow, como el afro ahora que salió. No se encasilla todo en un año y lo que pegó ese año.
P. Además de artista principal, también es compositor y productor, ¿cómo aborda de diferentes maneras esas facetas?
R. Soy muy diverso siempre en mi vida. Me gusta hacer de todo, yo produzco, grabo, lo que tenga que hacer, lo voy a hacer. En Timelezz yo empecé a producir; en Famouz me enfoqué un poco más en desarrollar mi delivery, mi voz, los punchlines, los coros. Pero en este disco pude de verdad sumergirme en todo lo que es la creatividad. Decir, “mete esta canción con esta”, “no, párala ahí”, “no, mete este productor”, “mete esta canción”. Eso es un productor, no es solo meterte y hacer las melodías, sino dirigir y materializar lo que tú tienes en tu mente.
P. Entonces, ¿en este disco tiene mano en todo?
R. En todo. Eso es todo mío, ideas mías. Que a veces la gente no entendía. Pero este es mi mundo, este es mi universo.
P. ¿Cómo siente que ha evolucionado desde Eyez on Me hasta este nuevo álbum?
R. Demasiado. Yo digo que la música me moldeó. La música me ayudó a encontrarme, a saber quién yo soy, qué son las cosas que me gustan, las cosas que no me gustan... Se puede ver, se puede escuchar el crecimiento. Hay muchas cosas que no sabía de arte, el amor que le tengo al arte, a los restaurantes, a los países, al cine, los scores de las películas… La música me ha ayudado a conocer tantas cosas, tantas culturas, subculturas, demasiadas cosas que ni yo sabía que existían. So, en todo me ha ayudado a crecer, tanto como profesional como a nivel personal. De verdad que sin la música no fuera ni mitad de lo que soy.
P. ¿Cómo hace para mantenerse presente en el género urbano que está siempre en evolución?
Tienes que estar outside. Tienes que escuchar, tienes que dejar el ego a veces. Escuchas, son gente joven, yo me recuerdo mucho cuando yo era joven y obviamente entran cosas nuevas y tú te mezclas con las personas y te pegan eso. Yo soy una esponja, yo aprendo. Yo soy un estudiante de esto, no te creas que porque yo llegué aquí ya yo me creo que yo soy el más que me la sé. No, hay gente mucho más talentosa, hay gente que no sabe de música y tiene una creatividad, hay gente que tiene 20 años y tiene demasiado estilo. So, es todo un aprendizaje, es aprender, es sumergirte, es la humildad de tú decir “yo quiero seguir aprendiendo”, quiero boom, este sonido, dejarte llevar, confiar. Por más duro que sea, más productor que sea, escuchar y dejarte llevar y escuchar otra perspectiva no te va a hacer menos.
P. En uno de los posts en los que anuncia el nuevo álbum dice “Gracias a mi isla por regalarme lo que siempre soñé”. ¿Cómo lo ha inspirado Puerto Rico y cuál es su relación con ella ahora?
Puerto Rico me hizo. Yo soy Puerto Rico. Puerto Rico es todo para mí, mano. ¿Qué te puedo decir? Viniendo de la escuela de chamaquito, con el bulto y escuchando Arcángel en los carros pasando, y yo soñar que me escucharan en esos carros un día. La cultura de la música allá es demasiado de rica. Yo vengo de un residencial público, que son muchas viviendas donde vive un conjunto de personas, obviamente de bajos recursos pero demasiado rico en cultura. Y eso fue lo que me hizo. Escuchar esos sonidos mientras yo estaba por ahí. Yo amo Puerto Rico y siempre voy a amarlo. Y doy la vida por Puerto Rico. Y donde quiera que yo me pare, yo soy puertorriqueño hasta que me muera.
R. ¿Qué le gustaría ver para el futuro de Puerto Rico?
Me gustaría que se sumerjan en otra cosa. No todo tiene que ser el maleanteo, no todo tiene que ser la calle. Yo pienso que se ha idolatrado demasiado el maleanteo y la calle, y eso está cool y crecimos todos con eso, pero hay muchas más cosas. Hay arte. La gente no sabe que Basquiat era mitad puertorriqueño y es uno de los pintores más grandes de la historia. Hay muchas cosas más, no todos tienen que ser artistas, tampoco, hay tantas cosas en las que sumergirse.
Creo que hace falta mucha inteligencia emocional en Puerto Rico también. Terapia. Venimos de generaciones de jóvenes que criaron jóvenes, ¿entiendes? Hay muchas cosas que ahora que yo salgo de la isla veo que tenemos que mejorar y que tenemos que cambiar como personas, porque somos gente de buen corazón, somos temerosos de Dios, so hay que arreglar esas cosas. Más educación; las escuelas, o sea, las escuelas se están cayendo. ¿Dónde está el dinero de esas escuelas? Tus hijos viven ahí, ¿cómo tú puedes coger el dinero para ti cuando tus hijos viven ahí y van a la escuela? La educación es el futuro. Hacen falta muchas cosas que se están perdiendo, por eso toda está centralizándose en la calle, en el maleanteo, porque es que no hay otros recursos.
R. Para acabar, algo más ligero: ¿de dónde salió el “me sigue o no me sigue”?
(Risas) No sé, eso me vino. Un día yo estaba grabando y yo creo que escuché a Arcángel, en una canción de chamaquito, decir “me sigue” y entonces no sé, lo combiné y “me sigue o no me sigue todavía”. Como que no te puedo decir que salió de aquí, salió de mis loqueras y se quedó.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.