Consejos para alimentar correctamente a los animales de compañía
La edad, raza, actividad física y características particulares de cada animal influyen en sus necesidades alimentarias. Una nutrición adaptada evitará la obesidad o bajo peso y enfermedades asociadas
¿Qué cantidad, en qué momento y cómo alimentar a perros y gatos en el hogar? Las dudas más frecuentes sobre la alimentación de las mascotas tienen aspectos en común entre perros y gatos. En ambos casos, la edad, raza, condiciones particulares —como la esterilización— y nivel de actividad física diaria influyen en su peso ideal y correcto desarrollo. Ambos necesitarán una alimentación equilibrada: por ejemplo, la gama Advance Active Defense para perros y gatos, que cubre sus necesidades energéticas y nutricionales, con niveles adecuados de proteínas, aminoácidos esenciales, vitaminas, minerales y ácidos grasos.
Rangos de peso ideales en mascotas
¿Cómo saber si un perro o gato está comiendo demasiado o ignora la comida? Se estima que el volumen de grasa óptimo de los animales está entre un 15 y 25%. A simple vista se puede observar la acumulación de grasa de los compañeros peludos, siguiendo la tabla elaborada por el comité de nutrición global de la World Small Animal Veterinary Association (WSAVA).
Si no se palpan fácilmente las costillas, observamos el abdomen redondeado y flácido, y depósitos de grasa visibles en el área lumbar, cuello y base de la cola es momento de consultar con el veterinario sobre el peso ideal de la mascota.
La Asociación para la Prevención de la Obesidad en los Animales de Compañía de Estados Unidos ha elaborado un listado con los rangos de peso ideales en perros de raza que sirve de orientación. Así, por ejemplo, un Beagle debería pesar entre ocho y 14 kilos y un Labrador Retriever no debería superar los 35 kilos en su etapa adulta. En los gatos, por su parte, también existen grandes diferencias en función de su raza. Mientras un gato común no debería superar los tres o cuatro kilos de peso, los Maine Coon tienen un peso medio de ocho kilos. Se considera sobrepeso cuando un animal está entre un 10 y 19% por encima de su peso ideal, que sería obesidad si supera el 20%.
También puede suceder que la mascota se encuentre por debajo de su peso. Si de repente se observa que el perro o gato come menos de lo que le corresponde, hay que consultar si existe alguna causa orgánica, ya que podría tratarse de un problema de salud. Una disminución en la ingestión de alimentos por la pérdida total del apetito se denomina anorexia. Si crees que tu perro puede estar desarrollando anorexia es fundamental analizar los factores que lo rodean: nutricionales, sensoriales, experiencias previas o episodios de estrés. Además, siendo más específicos, también puede deberse a causas orgánicas, como enfermedades sistémicas o patologías de tipo mecánico.
En el caso de los gatos, en cambio, un descenso en sus ganas de comer puede relacionarse con cambios bruscos en el tipo de alimentación o una situación puntual de estrés, provocada por cambios en el hogar y en sus rutinas, que es posible corregir creando un ambiente seguro y estimulante. Las épocas de calor o frío extremos igualmente influyen en su apetito, por lo que deberemos atender sobre todo que se mantengan correctamente hidratados y consultar al veterinario en caso de duda.
¿Cómo alimentar correctamente a las mascotas?
Existen dos formas de alimentar a las mascotas: ad libitum (a su voluntad, dejando el comedero con alimento abundante a su alcance, para que pueda alimentarse libremente), o de forma racionada. En el caso de los gatos, la alimentación libre reduce el estrés y la ansiedad por la comida y permite al animal autogestionarse y comer pocas cantidades, varias veces al día. Las hembras en etapa de gestación o lactación requerirán más cantidad, acorde a las altas necesidades nutricionales que tienen en esta etapa de vida. En estos casos puede ser recomendable la alimentación ad libitum. Sin embargo, no es recomendable para perros o gatos sedentarios o de gran apetito. En este caso conviene ofrecer la comida racionada en varias tomas, con la cantidad diaria exacta que le corresponda por edad, peso y nivel de actividad. Además, en caso de elegir la comida racionada es preferible mantener unos horarios y rutina de alimentación, y evitar el ejercicio intenso de los perros justo antes o después de comer. También existen los comederos antivoracidad y juegos de estimulación que requieren destreza para obtener el alimento y permiten una ingesta más pausada.
Existen dos formas de alimentar a las mascotas: ‘ad libitum’ (a su voluntad, dejando el comedero con alimento abundante a su alcance, para que pueda alimentarse libremente), o de forma racionada
Las necesidades alimentarias varían a lo largo de la vida de las mascotas y en cada momento habrá que adecuar la cantidad. Mientras los gatitos o cachorros pequeños, por ejemplo, requerirán poca cantidad en varias tomas al día, los adultos y seniors irán variando la cantidad que necesitan en una o dos tomas al día. En los sacos de alimentación de Advance Active Defense y en su web siempre estará disponible la información sobre la cantidad diaria recomendada para cada mascota.
Perros y gatos esterilizados presentan una peculiaridad y es que pueden cambiar su comportamiento ante la comida y demandar más cantidad de la que realmente necesitan. Esto, sumado a que sus necesidades son menores por el cambio en su metabolismo, puede ser el comienzo del desajuste entre ingesta y consumo de energía. Ante las primeras señales de alteraciones en su peso debemos consultar con el veterinario y controlar su alimentación.