Rivera: “Están pisoteando nuestros derechos fundamentales”
El líder de Ciudadanos critica la 'ley mordaza' y define como "tóxicos" a PP y PSOE
Albert Rivera, el presidente de Ciudadanos, ha criticado duramente la 'ley mordaza' que entra en vigor este miércoles. "Aquí están en juego derechos fundamentales que nos están cortando, que nos están pisoteando. Es un error grave en la política española", ha dicho el líder de la formación emergente sobre la Ley de seguridad ciudadana, unánimente criticada por la oposición y aprobada con el único apoyo del Partido Popular.
El líder de Ciudadanos ha recordado que está a favor de regularizar la marihuana, de que la Iglesia no tenga privilegios, o que es ateo
"Hace tiempo que la democracia española se ha degradado, se ha podrido", ha valorado Rivera, de visita en un Madrid con las arterias congestionadas por los cortes de tráfico que han permitido la manifestación convocada en contra de la norma. "La ley mordaza es el típico calentón político de los que no entienden lo que está pasando, un intento de control de todos. Es un error para nuestra democracia", ha recalcado el líder de Ciudadanos, que el jueves sabrá si tiene rival en las primarias en las que se elige al candidato de su formación a La Moncloa.
El horizonte de las elecciones generales ha marcado un cambio de discurso en la formación emergente. Tras pactar gobiernos autonómicos con el PSOE (Andalucía) y el PP (Madrid, Murcia, La Rioja y Castilla y León), Ciudadanos pone ahora el acento en que es una opción de Gobierno con los mimbres necesarios para trascender las labores de oposición.
"No queremos estar en sus gobiernos", ha dicho Rivera en El Hormiguero, donde ha participado en un juego de puntería que ha acabado con Pablo Motos, el presentador, bañado en agua. "Son partidos tóxicos", ha añadido sobre los dos partidos mayoritarios. "¿Va a líderar Rajoy una nueva etapa política en España? Yo creo que no. No cree en ello", ha añadido en el programa, donde ha recordado que está a favor de regularizar la marihuana, de que la Iglesia no tenga privilegios, o que es ateo. También ha marcado distancias con Podemos, la otra formación emergente que lucha por rebasar los límites del bipartidismo: "Están obsesionados con el poder, con llegar al poder, con desalojar al PP del poder. Y los problemas de España son la corrupción y el paro".
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