Sánchez proclama que el PSOE “es la única izquierda” capaz de gobernar

La victoria del PSOE de Andalucía y de Susana Díaz el pasado 22 de marzo quiere ser para los socialistas la palanca de su recuperación en las elecciones municipales y autonómicas del próximo 22 de mayo. Este es el espíritu con el que se desarrolla la reunión del Comité Federal del PSOE que ha empezado con un aplauso fuerte y sostenido para Díaz, presidenta en funciones de Andalucía. El secretario general, Pedro Sánchez, ha utilizado esa victoria del pasado domingo de sus compañeros andaluces para augurar tiempos inmejorables para su partido.

“La victoria del 22 de marzo en Andalucía ha demostrado que somos la izquierda que puede gobernar; el PSOE andaluz es un gran partido, un partidazo, y al ganar en Andalucía el PSOE ha empezado el camino para gobernar en toda España”. Muchos elogios a Susana Díaz han salpicado el discurso de Sánchez, que no ha querido quedarse atrás en el sentir de todos los barones territoriales que en este Comité Federal rendirán su admiración por la victoria de Díaz en circunstancias muy difíciles.

Todos los aspirantes en las elecciones de mayo son conscientes de que mucho camino tienen que recorrer para salir de la oposición toda vez que hasta ahora el PSOE en buena parte de España no tiene la fortaleza de su organización andaluza. La excepción está en Asturias, presidida por el socialista Javier Fernández, que junto a Andalucía constituyen los dos únicos bastiones de poder de los socialistas en España.

Cómo se gobierna en Andalucía, en Asturias y en alguna medida en Canarias, donde el PSOE sirve de apoyo al Ejecutivo de Coalición Canaria, ha sido uno de los argumentos que ha utilizado Pedro Sánchez para contrastar el manejo de la crisis económica por el PP con la manera de actuar de los socialistas. El adversario del PSOE es el PP, como ha puesto de manifiesto Pedro Sánchez, pero, sin citarlo por su nombre, Podemos también está en el enemigo a batir. “No es la crisis económica, sino el modelo que lleva a cabo la derecha”, ha dicho Sánchez. “Quien no tenga un proyecto claro para sostener el Estado de bienestar no es de izquierdas”, ha definido el líder socialista. Una invectiva para el PP y otra a Podemos sin llamarlo por sus siglas. Así ha discurrido la intervención inicial de Pedro Sánchez, muy centrada en animar a sus dirigentes autonómicos y municipales que en siete semanas se someterán al escrutinio de las urnas.

Durante más de una hora de intervención, el líder socialista ha desgranado el proyecto global del PSOE en una suerte de recordatorio del debate del Estado de la nación que él mismo protagonizó el mes pasado. Las críticas al Gobierno las ha alternado con el anuncio ya conocido de reformas del sistema educativo, del modelo productivo y el anuncio de que en los próximos días el PSOE presentará un nuevo Estatuto de los Trabajadores: “La batalla ideológica se va a dar en la reforma fiscal, en la que el PSOE presentará su propuesta en defensa de las clases medias y trabajadoras”. Ahora les toca a los socialistas reunidos en este Comité Federal conseguir no tanto ser la lista más votada en las comunidades autónomas donde se presenta —solo lo podrá conseguir seguramente Asturias— sino conseguir que el PP pierda la mayoría absoluta.