Alejandra de la Paz, directora del INBAL: “Vamos a tener un enorme diálogo para resarcir las fricciones con las comunidades artísticas”
La funcionaria llega a la dependencia de cultura con la misión de “tejer nuevos puentes” con los artistas tras la tensión vivida durante el pasado sexenio por los recortes en el sector
Nuevos aires soplan en el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL). Tras seis años de una relación tensa entre el Gobierno mexicano y la comunidad artística del país, la nueva directora de esa institución, la gestora cultural Alejandra de la Paz, asume la dirección con una palabra como bandera: diálogo. A lo largo de esta entrevista concedida en las oficinas del INBAL, en el complejo de teatros cercanos al bosque de Chapultepec, la funcionaria afirma que tiene el respaldo de la secretaria de Cultura, Claudia Curiel, para “tejer nuevos puentes” con los artistas de México y “resarcir las fricciones” abiertas por la pasada Administración debido a los recortes en los presupuestos de Cultura.
De la Paz afirma que México está “en un momento único”, cuando desde la presidencia de Claudia Sheinbaum y el liderazgo de Curiel hay un interés por reforzar la educación artística, apoyar las bellas artes e impulsar proyectos que beneficien a la comunidad de creadores y promotores culturales de México. La directora dice que quiere “tener un pulso muy cercano, muy cordial, de un enorme diálogo con las distintas comunidades artísticas, para entender por dónde, con los recursos limitados que siempre tendrá la cultura, hacer un uso mucho más estratégico de ellos”. Entre los planes está invertir 1.500 millones de pesos en la infraestructura y el equipamiento de las escuelas de arte, abandonadas durante décadas, a tal punto que sus estudiantes han estado en guerra abierta con las autoridades.
La funcionaria conversa en esta entrevista sobre sus planes para el INBAL y de los problemas que enfrenta la institución, como la tensa relación con los trabajadores, que denuncian falta de recursos y descuido de los museos que forman parte de esa organización. También está la presión de los sindicatos, que puede ser un muro para los planes de la nueva dirección. En eso también de la Paz habla de diálogo, pero deja claro que su trabajo se encaminará a que el INBAL funcione, que no se paralice por presiones sindicales.
Pregunta. Ha habido denuncias de corrupción sobre el INBAL. ¿Cómo ha recibido la institución?
Respuesta. Recibí una institución sólida, con un trabajo bien encaminado. Todo lo que he recibido tiene transparencia y cumple con las normas que nos marca la Secretaría de Hacienda. Este instituto ha logrado consolidar un conjunto de actividades que van desde la enseñanza artística, la profesionalización en las artes, hasta la oferta en museos. Como toda institución de este tamaño, tiene mucho camino por delante y muchas áreas que fortalecer.
P. ¿Cuáles son esas áreas?
R. Sin lugar a dudas, la educación artística, porque eso nos abre una ventana de oportunidades que a mí me parece maravillosa, no solamente con la adjudicación de un presupuesto especial, sino con el trabajo que empezamos con la secretaria Claudia Curiel desde que tomé posesión del cargo, de hacer un diagnóstico integral. Eso nos ha permitido tener un panorama sólido de cómo fortalecer y llevar a un nuevo estadio la educación artística. Este diagnóstico ha implicado desde el equipamiento, hasta la infraestructura, aunque pasa por muchos otros temas que son igualmente necesarios, como reformular planes y programas de estudio, fortalecer las capacidades docentes, brindar a las escuelas un enriquecimiento a través de la incorporación de expertos de otras latitudes.
P. ¿Esta iniciativa viene por la presión que hicieron estudiantes de escuelas como el Conservatorio de Música?
R. La iniciativa viene de un interés genuino por parte de la doctora Sheinbaum en la educación y en la educación artística en particular. Por supuesto que las protestas de los estudiantes suman a que nos movamos con mucha velocidad para crear este programa integral. Fueron protestas respaldadas por condiciones que no eran las óptimas y trataremos de generar las mejores posibles.
P. Uno de los temas más controvertidos de la pasada Administración fue el recorte a los presupuestos de Cultura, que generó muchas críticas del sector. Hay una sensación de fractura. ¿Cómo es su relación con el mundo de la cultura ahora?
R. Tenemos varios escenarios que nos permiten ser optimistas. Cuando comenzamos a hablar con la secretaria de Cultura del equipo que se integraría al instituto se evaluaron perfiles y al final la decisión que se toma, en la mayoría de los casos, es de artistas en activo, profesionales de la gestión cultural. Eso nos permite tener un pulso muy cercano, muy cordial, de un enorme diálogo con las distintas comunidades artísticas, para entender por dónde, con los recursos limitados que siempre tendrá la cultura, hacer un uso mucho más estratégico de ellos.
P. Se trata de cerrar heridas que se quedaron abiertas por los recortes y la relación tensa que hubo con el pasado Gobierno.
R. Sí, espero que esas fricciones que se pudieran haber dado puedan ser resarcidas a través de este diálogo muy fructífero. Algo que nos ha pedido con mucho énfasis la secretaria Curiel es retomar, fortalecer, renovar nuestra relación con los Estados de la República, no solo a nivel de los grupos artísticos, sino también de la interacción en términos de educación artística, en proyectos comunitarios.
P. ¿Cómo es su relación con la secretaria Curiel?
R. Es una relación positiva, muy enriquecedora. La secretaria Curiel conoce muy bien el campo de las artes escénicas, de la música, de los museos, le entusiasma y ha sido una gran promotora de que el INBAL se fortalezca y genere estas nuevas formas de diálogo, una interacción mucho más fluida entre las distintas entidades que conformamos la Secretaría de Cultura.
P. O sea que tiene el respaldo de la secretaria para hacer su trabajo.
R. No solo tenemos el respaldo, sino el entusiasmo y la pasión, además del conocimiento. Sin lugar a dudas es un momento único. Estamos muy entusiasmados de arrancar como equipo en todo este nuevo transitar.
P. Uno de los problemas a los que se enfrenta la institución está relacionado con los trabajadores. Hemos visto museos que pertenecer al INBAL con pancartas que alertan de que los trabajadores no cuentan con los materiales para ejercer sus funciones. ¿Cómo enfrenta usted estos reclamos?
R. Lo queremos enfrentar a partir de un diálogo respetuoso y abierto con toda la clase trabajadora. Es importante que todos reconozcamos que el principal centro de nuestra acción son los públicos y nuestros estudiantes. El objetivo es que nuestros espacios brinden el servicio que deben brindar, que estén abiertos a los públicos y que cumplan su función social. Siempre habrá puntos que generen algún tipo de conflictos, discordia, pero la libertad de expresión está siempre presente. Los trabajadores cuando se sienten agraviados por alguna cosa tienen el derecho a manifestarse. Lo que estamos buscando es que la relación sea provechosa para ambas partes, que nunca se vulneren los derechos adquiridos, pero que podamos trabajar para que sea un instituto sostenible.
P. Los sindicatos son un brazo poderoso dentro de la institución, pueden ser un muro para los planes de la dirección. ¿Cómo es su relación con los sindicatos?
R. La base trabajadora está organizad a partir de sindicatos, son muchos los que tiene el instituto y pues este diálogo del que hablo está en apertura. Creo que tenemos una base trabajadora talentosa y comprometida. Ha habido momentos en que el retraso en pagos de algunas prestaciones han llevado a esta situación compleja, pero estoy convencida de que los trabajadores del INBAL podemos construir una relación que tiene que ser productiva. La institución está aquí para cumplir una función que marca la ley, no estamos aquí para atender lo que los funcionarios quieren ni tampoco para atender todo lo que los trabajadores quieren.
Fraudes en nombre del INBAL
El equipo de Alejandra de la Paz ha tenido que enfrentar en semanas recientes una avalancha de denuncias de fraudes hechos a nombre del INBAL. Artistas, académicos o personas relacionadas con la cultura en México han alertado de llamadas de personas que ofrecen puestos dentro de la institución. Algunas de ellas han caído en la trampa y han entregado hasta 10.000 pesos a cambio de supuestamente congelar la falsa plaza por parte de los sindicatos del INBAL. "Es muy preocupante que usurpando identidades le hablen a integrantes de la comunidad ofreciéndoles un trabajo que no existe e intentando extorsionarlos a partir de solicitudes de pagos que tampoco existen en el instituto. Son fraudes. Hemos interpuesto las denuncias correspondientes en la Fiscalía”, afirma la dictora. De la Paz dice estar “convencida” de que estos fraudes no llegan de personal de la institución que dirige. “Cuando hemos tenido información sobre el contenido de las conversaciones, hacen ver que es alguien que se informa de posibilidades de trabajo de la institución, de cómo medianamente funcionamos. Es gente que se informa bien para cometer estos ilícitos, pero no pensamos que sea alguien que venga de la institución”, dice de la Paz.
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