Sheinbaum, tras la polémica con Ken Salazar: “Siempre habrá diálogo, pero hay cosas que solo corresponden a los mexicanos”

“Siempre habrá diálogo, pero hay cosas que sólo les corresponden a los mexicanos”. Así respondió la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, al embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, tras una semana de turbulencias en la relación bilateral por el cruce de declaraciones en torno a la reforma judicial. Washington expuso sus preocupaciones en un duro comunicado que reprobaba la propuesta de elegir a jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte por voto popular. En una gira con Andrés Manuel López Obrador, la futura mandataria se distanció este fin de semana de los señalamientos de Salazar y refrendó su apoyo al proyecto de ley propuesto por la Administración saliente, pese a las presiones desde el exterior. Morena adelantó que espera aprobar la iniciativa en la primera semana de septiembre.

López Obrador y Sheinbaum visitaron este sábado Durango y Sonora, y evitaron ahondar en los comentarios de Salazar, que señaló que la elección de jueces por voto directo “es un riesgo para la democracia en México” y auguró que no será efectiva para erradicar la corrupción en el Poder Judicial. El embajador afirmó el jueves que la propuesta merma la confianza de los inversores de su país, amenaza la relación comercial y abre la puerta a que el crimen organizado penetre en el sistema de justicia. Tras la publicación de una nota diplomática y el rechazo de López Obrador, que acusó una “burda actitud intervencionista”, Salazar bajó el tono el viernes y dijo que estaba dispuesto a dialogar para desahogar las diferencias. El presidente adelantó a los medios que será hasta La Mañanera del lunes cuando responda al embajador.

Sheinbaum fue mucho más vocal ese mismo viernes sobre la posición del próximo Gobierno sobre la iniciativa de ley. “La reforma judicial que se está planteando es que al Poder Judicial lo elija el pueblo de México para que le rinda cuentas al pueblo de México”, afirmó. La presidenta electa aseguró que la elección de jueces está respaldada por el mandato popular que le dio el triunfo en las urnas. “Fue una decisión que también tomó nuestro pueblo el pasado 2 de junio”, comentó.

Morena argumenta que el mecanismo de selección actual en el Poder Judicial se presta a que los potentados tengan tribunales a modo y se anticipa como el colofón de años de roces entre el Gobierno de López Obrador y la Suprema Corte. Pese al nerviosismo de los mercados y el sector privado, Sheinbaum mandó otro mensaje que resuena tras las preocupaciones expuestas por Estados Unidos, el principal socio comercial de México, y los empresarios mexicanos. “Vamos a seguir gobernando con la división clara entre el poder económico y el poder político”, declaró esta semana.

La reforma judicial es el asunto que ha acaparado las miradas en la nueva legislatura en el Congreso, que arranca labores el próximo 1 de septiembre. El Instituto Nacional Electoral (INE) oficializó también el reparto de escaños en el Legislativo esta semana. Morena y sus aliados tendrán la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y se quedaron apenas a tres curules de conseguirla en el Senado, lo que les hubiera permitido realizar cambios en la Constitución sin necesidad de negociar con la oposición.

La distribución, precedida de semanas de polémica por los reclamos de los opositores por la sobrerrepresentación del bloque gobernante, tendrá que ser ratificada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Sheinbaum celebró el criterio seguido por el INE para el reparto de posiciones en el Congreso. Dijo que “se actuó bien” y “se cumplió con la ley y la Constitución”. El Legislativo es el último frente de batalla abierto tras las elecciones de junio pasado y el equilibrio final de fuerzas será clave también para determinar el futuro de la reforma judicial, así como de una batería de propuestas que López Obrador quiere que se aprueben antes de cerrar su mandato el próximo 1 de octubre. Hay pocos elementos para creer que el Tribunal hará una interpretación distinta a la del INE.

Los ecos de los comentarios de Salazar, sin embargo, aún retumban en el Congreso. Ricardo Monreal, alfil de Morena en el Legislativo, insistió en que el embajador “se excedió” y cerró filas contra cualquier “tipo de intervencionismo”. El político, que recién obtuvo un escaño como diputado, adelantó que se buscará que la reforma judicial sea aprobada en la primera semana de septiembre en la Cámara baja, para después ser turnada al Senado. “Comenzaremos con este dictamen de la reforma judicial, quizá el propio 1 de septiembre, en una sesión distinta a la de la instalación [de la nueva legislatura]”, anticipó Monreal. La reforma de Pueblos indígenas y la que traspasa definitivamente la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional también recibirán trato prioritario por la mayoría oficialista.

En las calles, jueces y magistrados en una veintena de Estados del país mantienen un paro sin precedentes para defender sus derechos laborales y la división de poderes, que ha sido calificado como “ilegal” por el Gobierno y mantiene cientos de tribunales funcionando en servicios mínimos. A las puertas del inicio de un anticipado proceso legislativo, la polémica se perfila a marcar la agenda política de las próximas semanas y meses.

Apúntese gratis a la newsletter de EL PAÍS México y al canal de WhatsApp y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país.