Delfina Gómez prioriza la lucha contra la corrupción en su toma de protesta como gobernadora del Estado de México

Tres meses después de haberle arrebatado al PRI su bastión histórico, Delfina Gómez ha rendido protesta este jueves como nueva gobernadora del Estado de México, poniendo oficialmente fin a casi un siglo de Gobierno del partido tricolor. La nueva jefa del Ejecutivo se ha convertido también esta tarde en la primera mujer en ponerse al frente de este Estado, el más importante del país en términos de demografía y presupuesto.

“Lo voy a decir muy claro y fuerte: el servidor público que no cumpla con rectitud e integridad su encomienda será removido y, en su caso, castigado con el peso de la ley. Ya basta de tanta corrupción. Se acabaron los negocios fraguados desde la oficina del Gobierno y las riquezas constituidas al amparo del Estado”, ha expresado contundente en la ceremonia celebrada este jueves.

Al acto han asistido el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador; el hasta ahora gobernador, Alfredo del Mazo; y el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de México, Ernesto Sodi Cuellar. En su discurso, centrado en la transparencia y la lucha contra la corrupción, Delfina Gómez también ha tenido palabras de agradecimiento para el líder de Morena, que acaba de pasar el bastón de mando a su sucesora en el cargo, Claudia Sheimbaum. “Presidente: las y los mexiquenses valoramos lo que ha logrado en estos recientes años a favor del pueblo. Su legado será trascendente. Por esa misma vía transitará el Estado de México”, ha subrayado la exsecretaria de Educación, que hoy inaugura una nueva época marcada por el liderazgo femenino en el partido.

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